En el cantón La Maná, provincia de Cotopaxi, a 240 kilómetros de Quito, se registró un grave incidente de ajusticiamiento popular. La comunidad prendió fuego a una personas y causó heridas mortales a otra.
Según los residentes locales, tres personas habrían entrado a robar en un negocio de compra y venta de oro y fueron detenidas por la multitud. Los tres sospechosos fueron linchados, y a uno de ellos le prendieron fuego. Cuando se preparaban para quemar vivos a los otros dos, llegó la Policía. El hecho sucedió aproximadamente a las 19:00 del sábado, pero la información, hasta este lunes, aún es escasa.
La Policía y el personal de Criminalística llegaron al lugar donde aconteció el ajusticiamiento para recoger las pruebas y realizar investigaciones. En el proceso, se incautó las motocicletas incendiadas, un machete, componentes de un arma de fuego y un teléfono celular. La persona herida, de 18 años sin antecedentes penales, fue trasladada a un centro de salud con pronóstico reservado. El herido responde al nombre de Christian Steven Monsalve Viera.
El coronel Iván Monteros, jefe del Distrito La Maná, explicó en un video publicado en la cuenta de X de la Policía Nacional que una unidad policial de Tránsito respondió la llamada de emergencia. Los agentes fueron alertados por la ciudadanía sobre disparos de arma de fuego y se dirigieron al lugar del linchamiento.
El oficial informó que los policías se encontraron con una multitud de 800 a 1.000 personas enardecidas, armadas con armas blancas, palos y tubos de metal. Las personas estaban protestando y habían incendiado una motocicleta, expresando su deseo de hacer justicia por mano propia contra los individuos acusados de delinquir o extorsionar. La policía trató de evitar que los otros dos detenidos fueran quemados vivos, ya que incluso les habían rociado con combustible. Ambos hombres resultaron gravemente heridos y fueron llevados a un centro de salud, donde uno murió. La Policía confirmó oficialmente dos muertes y un herido.
El ministro del Interior, Juan Zapata, dijo a los medios públicos de Ecuador que “la gente ya no cree en la justicia, porque la Policía detiene a los delincuentes y salen de manera inmediata. la Policía hace su trabajo; tienen varias detenciones”, indicó. Además, aseguró que este no es el primer caso de linchamiento, Zapata señaló que “la violencia no se soluciona con más violencia. Quienes fueron los responsables tendrán que ser sancionados. La Fiscalía ya está generando investigaciones por este tema”.
Los tres sujetos entraron a robar al establecimiento, que tenía vidrios blindados. El dueño, al darse cuenta de sus intenciones, cerró las puertas, que solo se abrían desde adentro. Logró escapar por una puerta trasera, pero los tres ladrones quedaron atrapados. Luego, alertó a la ciudadanía, abrió la puerta y la gente los sacó a la fuerza, los golpearon y los prendieron fuego.
Los cuerpos de dos presuntos delincuentes, quienes aparentemente también estaban involucrados en extorsiones, quedaron en la calle con signos de violencia e incinerados, mientras que su presunto cómplice, Christian Steven Monsalve Viera, de 18 años, fue llevado a un centro de salud. Según el médico que lo atendió, en un testimonio publicado el Diario Extra, Monsalve tenía un traumatismo craneoencefálico, traumatismos en varias partes del cuerpo, una herida en el tórax causada por un objeto punzante, posiblemente un cuchillo, y se encontraba en estado crítico.
Cuando los policías llegaron, uno de los individuos quemados todavía estaba ardiendo, y le habían amputado un brazo con un machete. La policía intervino para evitar que los ciudadanos tomasen la justicia en sus manos.
Las investigaciones continúan, y se espera identificar a los fallecidos en las próximas horas. La Policía también investiga los presuntos delitos que los individuos habrían cometido en La Maná y si hubo un enfrentamiento con armas de fuego.