• Los allanamientos se tuvieron que adelantar ante el asesinato de un policía
  • Se decomisó evidencia importante para la investigación 

Redacción- El Organismo de Investigación Judicial estaba a tan solo unos días de detener a la organización criminal que protagonizó una balacera que dejó un policía muerto en Herradura, en Garabito de Puntarenas.

La policía judicial ya tenía preparada una serie de allanamientos para intervenir la próxima semana a la organización criminal.

En esas diligencias, las autoridades tenían pensado detener a todos los miembros de la banda, incluido su líder, quien es uno de los sospechosos de asesinar al oficial Bryan Rivera.

Según confirmó la policía judicial, los allanamientos se debieron adelantar ante el crimen de Rivera y se realzaron la noche de este pasado jueves 25 de enero.

«Tras los hechos acontecidos, este jueves y bajo dirección funcional del Ministerio Público, se tuvo que adelantar la acción policial que se tenía programada para la próxima semana, donde se pretendía detener a todos los integrantes de esta organización», informó el OIJ.

Este jueves se realizaron 12 allanamientos en el sector de Las Parcelas de Herradura, donde se realizó el registro y secuestro de indicios de interés en diferentes investigaciones que se siguen contra el grupo.

Concretamente, se incautaron artefactos electrónicos, un radio de comunicación, varios vehículos con denuncia por robo, indicios balísticos, 28 frascos de aparente ketamina, un paquete de marihuana comprimida, varias dosis de marihuana tipo cripy y dinero en efectivo.

También, en uno de los lugares allanados se ubicaron, en apariencia, varios rastros de sangre.

Además, en la diligencia se detuvo a una mujer de apellido Masis, de 23 años.

Los miembros de esta organización figuran como sospechosos de los delitos de Infracción a la Ley de Psicotrópicos, Privación de Libertad, Tentativa de Homicidio y ahora el Homicidio de un oficial de la Policía Administrativa.

En la investigación policial se pudo determinar que al menos siete personas, ocupaban posiciones claves dentro de este grupo criminal que operaba en el cantón de Garabito.

Gran cantidad de miembros de esta banda fueron arrestados por la policía tras el asesinato de Rivera, entre ellos el líder de apellido López, un nicaragüense de 39 años.

Los detenidos fueron:

  • López de 39 años de edad, nacionalidad nicaragüense
  • Martínez de 25 años de edad, nacionalidad nicaragüense
  • Ruiz de 25 años de edad
  • Neira, nicaragüense indocumentado
  • Salmerón de 32 años de edad, nacionalidad nicaragüense
  • Vega de 32 años

Finalmente, todos los detenidos fueron puestos a la orden de la Fiscalía de Garabito, para que se les determine su situación jurídica.