Foto: Fines Ilustrativos.

 

Redacción. La prohibición del matrimonio infantil en Colombia ha sido archivada ocho veces en el Congreso de la República y una vez más inició su trámite en la Cámara de Representantes, con la aprobación del primer debate en la comisión primera.
Aunque celebraron el avance del proyecto, las autoras no quedaron satisfechas con una modificación que introdujo el ponente del Pacto Histórico.
La iniciativa es de autoría de las representantes Alexandra Vásquez, del Pacto Histórico, y Jennifer Pedraza, de Dignidad y Compromiso, con el objetivo de acabar en Colombia las uniones tempranas de personas mayores de edad con niños, niñas y adolescentes entre los 14 y los 18 años.
Las congresistas han promovido el proyecto con el lema “por una infancia digna y un futuro sin ataduras: son niñas, no esposas”, que logró pasar el primer debate en la Comisión Primera y ahora deberá ser discutido en la plenaria de la Cámara de Representantes.
De acuerdo con la representante Vásquez, Colombia ocupa el puesto 20 a nivel mundial en el número de niñas y adolescentes en uniones maritales antes de cumplir los 15 años y el puesto 11 en matrimonios adolescentes. La situación es más alarmante en las comunidades indígenas, en las que el 33.8% de ellas son casadas antes de alcanzar la mayoría de edad.
“En Colombia una de cada cinco jóvenes entre 15 y 19 años tuvo una unión temprana en el 2020 y en el caso de las niñas menores de 14 años, 1 de cada 50. El matrimonio infantil que parece algo tan lejano a nuestro país, realmente es pan de cada día”, señaló la representante Pedraza.
A pesar del avance del proyecto, el debate generó polémica entre las autoras de la iniciativa y el ponente Eduard Sarmiento, también del Pacto Histórico.
Según la representante Vásquez, su compañero de bancada permitió un cambio en el proyecto original que choca con el propósito de su iniciativa.
“Estamos felices de que se haya aprobado el proyecto, aunque lamentamos que el ponente de la iniciativa Eduard Sarmiento, de la bancada del Pacto Histórico, sin tener en cuenta la opinión de las autoras, Jennifer y yo, haya tomado decisiones para desnaturalizar el objeto de este, fijando que sea permitido casarse a mayores de 16 años cuando ambas personas sean menores de edad, esto en contra de los estándares internacionales y tratados que ha ratificado el país”, explicó la representante Vásquez.
Para la representante, ese cambio en la edad mínima para contraer matrimonio mantiene en riesgo a las niñas y adolescentes, que son la población más vulnerable frente a este tipo de prácticas.