- En diversas localidades se están realizando evacuaciones obligatorias
Redacción- «Puedo decir sin dramatizar en absoluto: si deciden quedarse en una de esas zonas de evacuación, van a morir».
Con esas duras palabras, la alcaldesa de Tampa, Jane Castor, se dirigió a los habitantes de la ciudad de la costa oeste de Florida para que evacuen la zona, pues se espera que el peligroso huracán Milton impacte la noche de este miércoles.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC) ha clasificado a Milton como un «huracán potencialmente mortal», con vientos sostenidos de 230 km/h, a pesar de un ligero debilitamiento.
Los pronósticos indican que el huracán tocará tierra en o cerca de Tampa, lo que podría provocar inundaciones severas y marejadas ciclónicas en la región.
“Si una marejada ciclónica entra en la bahía de Tampa, no tienen adónde ir. Llegará a nuestros vecindarios”, advirtió Castor en una conferencia de prensa.
Ante esta situación, las autoridades han emitido órdenes de evacuación obligatorias para áreas en riesgo de inundación en el condado de Hillsborough y otros condados vecinos.
El presidente Joe Biden también instó a la población a evacuar de inmediato, enfatizando que se trata de “cuestión de vida o muerte” y que Milton podría ser la peor tormenta que EE.UU. haya enfrentado en un siglo.
A medida que se acerca la tormenta, los residentes de la costa oeste de Florida han comenzado a prepararse, lo que ha llevado a un aumento en las compras de víveres y a largas filas en las gasolineras.
El gobernador Ron DeSantis subrayó la seriedad de los planes de evacuación, recordando que no se podrán realizar rescates de quienes decidan quedarse. En respuesta, se han establecido 36 albergues para quienes necesiten refugio.
Con cientos de vuelos cancelados y aeropuertos suspendiendo operaciones, las aerolíneas han facilitado cambios sin costo adicional, mientras que algunos han programado vuelos extra para aquellos que buscan salir del estado.
Se espera que Milton toque tierra como un «huracán extremadamente peligroso» en la madrugada del jueves, con la región metropolitana de Tampa, hogar de más de tres millones de personas, como una de las áreas más amenazadas.
Los meteorólogos advierten sobre lluvias torrenciales, inundaciones repentinas y marejadas ciclónicas que podrían alcanzar alturas de entre 3 y 4,5 metros.
Dada la magnitud del huracán, las autoridades instan a la población a tomar medidas inmediatas para garantizar su seguridad.
