• Piden tener precaución en el cierre de año

Redacción – Un total de 1.250 conductores fueron remitidos a la Fiscalía entre enero y septiembre de este año por dar positivo en pruebas de alcohol, enfrentando un proceso penal por conducción bajo los efectos del alcohol, según informó la Policía de Tránsito.

De las 7.046 pruebas de alcoholemia realizadas en este periodo, 1.687 dieron resultados positivos, lo que representa un 24% del total de pruebas. De este grupo, un alarmante 74% (1.250 conductores) mostró niveles de alcohol tan elevados que ameritaron su presentación ante el Ministerio Público por el supuesto delito de conducción temeraria.

El director de la Policía de Tránsito, Oswaldo Miranda Víquez, expresó su preocupación ante estos resultados, destacando que uno de cada cuatro conductores testeados dio positivo a la prueba de alcohol.

“Es evidencia clara de un alto nivel de irresponsabilidad. Preocupa todavía más que el 74% de las pruebas que evidenciaron alcohol presenten niveles tan elevados que sorprende que esa persona pudiera conducir”, comentó Miranda Víquez.

El funcionario también comparó esta cifra con la del año anterior, cuando 66% de los conductores que dieron positivo fueron presentados a la Fiscalía. Este incremento a 74% en 2024 es motivo de mayor alerta, ya que se está ingresando en el último trimestre del año, un periodo marcado por las festividades y reuniones donde el consumo de alcohol aumenta.

Además de los casos judicializados, otros 228 conductores recibieron una multa de ¢364.000 por conducir bajo los efectos del alcohol, aunque sus niveles no ameritaban un proceso judicial. Estos conductores también acumularon 6 puntos en su licencia. Otros 209 conductores arrojaron niveles bajos de alcohol que no generaron sanciones.

Por otra parte, 80 personas se negaron a realizar la prueba de alcohol y recibieron la misma sanción económica de ¢364.000, además de los 6 puntos en su licencia, lo que también podría afectarles en el futuro.

La gravedad de la situación se refleja también en los accidentes fatales. En los primeros nueve meses de 2024, 12 personas perdieron la vida en accidentes relacionados con la conducción bajo los efectos del alcohol, dos de estos fallecimientos ocurrieron en septiembre, representando un incremento del 20% respecto a los meses anteriores.

Miranda Víquez hizo un llamado a la responsabilidad ciudadana de cara a las próximas festividades, instando a los conductores a evitar el consumo de alcohol antes de manejar, especialmente en un contexto donde los accidentes y fallecimientos vinculados al consumo de licor al volante continúan en aumento.

La multa por conducir bajo los efectos del alcohol en Costa Rica es de ¢364.000 para aquellos con niveles que no ameriten proceso judicial, además de 6 puntos en la licencia. Negarse a realizar la prueba de alcoholemia también conlleva la misma sanción, lo que podría derivar en la suspensión de la licencia si se acumulan suficientes puntos.