• Autoridades capturan a tres sospechosos tras descubrir una toma ilegal conectada a un poliducto en San Blas de El Carmen.

Redacción. Una organización criminal dedicada al robo de combustible que operaba en Limón trasladó sus actividades a San Blas de El Carmen, en Cartago, donde realizaron una millonaria inversión en una manguera de 300 metros de largo para extraer combustible de forma ilegal. Así lo confirmó este miércoles la Refinadora Costarricense de Petróleo (RECOPE).

El desplazamiento de la banda se dio tras intensos operativos en Limón que dificultaron su accionar. Tras meses de investigación, las autoridades determinaron que el grupo se reubicó en Cartago, donde estableció una toma ilegal en el poliducto cerca del puente sobre el río Toyogres, utilizando un sistema sofisticado de extracción y almacenamiento del producto robado.

Investigación y capturas

La pesquisa inició en julio de 2024 tras una denuncia confidencial recibida a la línea 1-0-0-2, la cual coincidió con alertas en el sistema de monitoreo de Recope. El martes 25 de febrero, luego de meses de seguimiento, las autoridades capturaron a tres personas relacionadas con el caso:

• Solís Conejo, administrador del predio.

• Cordero Calderón, conductor de un camión.

• Coto Sanabria, quien se encontraba comprando combustible en el sitio.

Posterior a las detenciones, la Fiscalía ordenó un allanamiento del predio, donde se hallaron múltiples recipientes de almacenamiento de combustible.

Un millonario robo

Los sospechosos utilizaron una manguera valorada en ₡3,2 millones, camuflada entre la vegetación y asegurada con candado, para extraer el combustible y trasladarlo al predio. Se estima que en los últimos siete meses, la banda robó 150.000 litros de combustible, que vendían en grandes cantidades y al menudeo. Parte del producto también era utilizado para consumo propio.

Karla Montero, presidenta de Recope, destacó que el éxito de esta operación fue posible gracias a la colaboración ciudadana y advirtió sobre la importancia de imponer medidas cautelares firmes para evitar que los responsables continúen delinquiendo.

“Este caso es un ejemplo claro de cómo una denuncia confidencial permitió desarticular una banda criminal. Seguiremos trabajando para proteger la infraestructura energética del país y evitar que estos grupos sigan poniendo en riesgo a la comunidad”, afirmó Montero.

Llamado a la denuncia

Recope recordó que cualquier sospecha de robo, transporte, almacenamiento o venta ilegal de combustible puede ser reportada de forma gratuita y confidencial al 1-0-0-2, con el fin de prevenir delitos y proteger la seguridad de la población.

Las autoridades continúan con las investigaciones para determinar si hay más personas involucradas en esta red de robo de combustible.

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