Redacción – De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), durante los primeros seis meses de vida, los bebés deben recibir lactancia materna, exclusivamente, pues es el mejor alimento para el lactante.
A partir de entonces, con el objetivo de satisfacer la evolución de sus necesidades alimenticias, deben incorporar alimentos complementarios, nutricionalmente adecuados e inocuos, al tiempo que siguen tomando leche materna.
Para la etapa de alimentación complementaria o introducción de alimentos sólidos, se debe procurar que el bebé se familiarice con los alimentos. Los especialistas recomiendan iniciar con frutas, vegetales o cereales infantiles y, conforme se observe que el niño los tolera adecuadamente, se pueden incorporar carnes y otros alimentos, de acuerdo con las indicaciones de un profesional de la salud.
Los colados infantiles, por ejemplo, se han consolidado como una opción de alimentos complementarios por sus características y beneficios:
- Son de textura muy suave (purés sin grumos, compotas).
- Están preparados con un solo ingrediente para facilitar la detección de posibles alergias o intolerancias.
- Son alimentos de fácil digestión.
- No se les adiciona sal, para asegurar el reconocimiento de sabores.
- No contienen saborizantes o colorantes de ningún tipo.
- Algunos utilizan el método de sellado al vacío, por lo que no contienen preservantes.
- Son alimentos fortificados con vitaminas y minerales, de acuerdo con la etapa de crecimiento del bebé.
- Existen opciones de colados de frutas y vegetales.
No obstante, existen muchos mitos alrededor de este tipo de alimentos. Patricia Vial, gerente de nutrición, salud y bienestar de Nestlé Centroamérica, nos aclara algunos de estos:
- Los colados tienen muy poco sabor: los colados están hechos para los niños, quienes necesitan ingredientes 100% naturales con poca o nula adición de azúcar. Por esto, a los adultos les pueden parecer insípidos.
- Todos los colados se elaboran a partir de banano o camote con saborizantes: cada producto debe indicar, en su etiqueta, la lista de ingredientes que se utilizan para su elaboración. Es importante leer este listado y cerciorarse que el producto elegido no contiene componentes artificiales, saborizantes o colorantes de ningún tipo.
- Los colados contienen mucho sodio (sal) y azúcar: estos productos están especialmente elaborados para los niños a partir de los 6 meses de edad, quienes necesitan consumir ingredientes 100% naturales, con poca o nula adición de sal o azúcar. Revise la tabla nutricional del producto y el listado de ingredientes, el cual va de mayor a menor contenido. Esto le permitirá verificar que este no tiene azúcares añadidos; lo que indica que el sabor dulce del colado proviene del azúcar natural de la fruta.
- Tienen muchos preservantes: el sellado al vacío es un método natural de conservación, por lo tanto, permite que el producto se mantenga en buen estado, sin necesidad de utilizar preservantes. Por lo general, los colados envasados en vidrio y que utilizan este método de sellado, no tienen preservantes, cumpliendo así, con las normativas legales establecidas para este tipo de productos.
- Los colados que venden en el supermercado tienen un contenido nutricional menor a los colados caseros: el valor nutricional de los colados dependerá de los procesos de elaboración y de los tiempos y temperaturas de cocción. Se trata siempre de evitar, al máximo, la pérdida de vitaminas y minerales importantes y, al mismo tiempo, garantizar un alimento seguro.
- Hay ingredientes que no se incluyen en las etiquetas de los colados: de acuerdo con las leyes de etiquetado nutricional, todos los ingredientes que se utilizan en la preparación de los colados deben aparecer en la etiqueta del producto.
- Es mejor diluir los colados para hidratar al bebé: los colados no están diseñados para ser diluidos. Esto puede hacer que pierdan o que disminuya su valor nutricional. El bebé permanece hidratado con la leche materna, jugos y agua que se le brinda durante el día. Solo en caso de enfermedades, se le debe suministrar un aporte adicional de líquidos según la recomendación de un profesional de la salud.
- Tienen colorantes, porque manchan la ropa: todas las comidas manchan la ropa, pero eso no quiere decir que sea debido a la adición de algún tipo de colorante. En la mayoría de los casos, el color de estos productos proviene solamente de las frutas y verduras con los que se preparan.