La Policía de Fronteras en la línea limítrofe con Nicaragua impidió el ingreso al país de 26.649 unidades de pólvora, en su mayoría de tipo explosivo y por lo tanto de gran capacidad destructiva.

Uno de los casos tuvo lugar la noche del miércoles en el sector de El Cevichito, en las cercanías del puesto fronterizo de Tablillas, cantón de Los Chiles, cuando en un patrullaje preventivo los oficiales se encontraron con una pareja que transportaban un bulto.

Al notar la presencia policial, un hombre huyó hacia suelo nicaragüense, dejando abandonada a la mujer que viajaba con él, así como el bulto en el que llevaba 26.400 triquitraques y 28 unidades de pólvora luminosa.

Por órdenes de la Fiscalía de Los Chiles se realizaron actas de hallazgo y destrucción de los explosivos, mientras que la mujer fue puesta a la orden de Migración y Extranjería, pues se encontraba en condición migratoria irregular.

El segundo caso se registró el jueves en la localidad fronteriza de Julio Zavala, también cerca del puesto de Tablillas de Los Chiles, donde los oficiales de la Policía de Fronteras interceptaron a un nicaragüense residente en el país, quien portaba un bulto en cuyo interior llevaba 200 triquitraques y 21 silbadores.

El caso fue remitido a la orden de la Fiscalía de Los Chiles, donde al nicaragüense, de apellido García, se le seguirá una causa penal.

Cabe indicar que la Ley de Armas y Explosivos establece penas de tres a siete años de prisión para quien adquiera, comercie, transporte, almacene y venda cualquier artículo pirotécnico sin tener el permiso para realizar este tipo de actividades o que no cumpla con los requisitos exigidos por esa ley.

La venta o el suministro de pólvora a personas menores de edad o a personas que no pueden valerse por sí mismas, se sancionará con la misma indicada anteriormente.

Los artículos pirotécnicos permitidos por el Ministerio de Salud y el Departamento de Armas y Explosivos del Ministerio de Seguridad Pública son los que producen un efecto de luz blanca o de colores y no son explosivos. Toda la pólvora explosiva está prohibida por ley y no debe ser vendida por menores de edad.