Redacción-La vida de Stephen Hawking no fue nada fácil, pero sus ganas de superarse día a día y su fortaleza hicieron que llevase una vida relativamente normal dentro de sus dificultades.
En 1965, Hawking se enamoró perdidamente de su primera mujer, Jane Wilde, con la que tuvo tres hijos: Robert,Lucy y Tim Hawking.
Fueron ellos quienes informaron del fallecimiento de su padre quienes recordaron que fue un gran científico y un hombre extraordinario cuyo trabajo y legado perdurarán por muchos años.
Sus hijos
Robert, el primogénito, nació en 1967. Como era el mayor de los tres, tuvo que ayudar a su madre en el cuidado del patriarca. Estudió en la Universidad de Oxford, en el Reino Unido, y actualmente trabaja como ingeniero informático, vinculado a Microsoft. Vive en Seattle con su esposa y dos hijos.
La única niña, Lucy, nació en 1970. Estudió periodismo, aunque se dedicó a la literatura infantil, una tarea que llevó a cabo junto con su padre. Una de sus obras, «The Key to the Universe», fue traducida a 38 idiomas y se vendió en 43 países.
El único hijo de Lucy, William, es autista. Batida por partida doble por enfermedades crónicas, desempeña un papel fundamental como vicepresidenta de «National Star College», una institución que ayuda a las personas con discapacidades.
Timothy (38), el más joven de los hijos de Hawking, vino al mundo cuando el matrimonio de sus padres estaba bastante deteriorado. Durante su niñez no se llevaba bien con su padre, sin embargo, cuando perdió la voz, el niño comenzó a compartir con él pasatiempos como la Fórmula 1 o el ajedrez.
Estudió francés y español en la Universidad de Exeter, en Reino Unido. Trabaja en la compañía danesa «Lego», que da nombre a una famosa marca de juguetes. Su relación con su padre mejoró mucho: programó palabrotas en la máquina con la que Hawking se solía comunicar, y ambos bromeaban mucho sobre su enfermedad.
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