Redacción- La empresaria y experta en moda Amanda Moncada no solo ha contagiado a sus compañeros de la quinta temporada de Dancing with The Stars con su tenacidad, ejemplo y positivismo, sino también ha creado motivación en sus seguidores para romper estereotipos sobre la limitación por la edad.
Cuenta que dijo sí a este reto con el fin de demostrarle a todos los que condenan o alejan a las personas por su edad. Para Moncada no se trata de un tema de años sino de actitud, de atreverse, de que sí se puede y mejor aún, de disfrutar de la vida.
Amanda, quien es madre de tres hijas y abuela de dos, es una de las 10 concursantes de la quinta temporada de Dancing with the stars. Ahí competirá contra el exdiputado Óscar López; la presentadora Viviana Calderón y su actual pareja el actor y empresario Pablo Rodríguez; el humorista Gustavo Peláez; el cantante Jecsinior Jara; la boxeadora Yokasta Valle; la triatlonista Johanna Solano; la conductora Keyla Sánchez y el bailarín de El Chinamo Wesley Vargas quien salió de primero.
“La edad no es un límite para cumplir los sueños y seguir adelante. Las personas creen que los adultos mayores estamos sentados esperando que llegue la pelona. Inclusive si ya tenés 40 años y pedís trabajo te ven feo. Para mi Dancing es una competencia personal”, manifestó Amanda.
Moncada comentó que se casó con un hombre serio y que amó con todo su corazón, sin embargo nunca sacó tiempo para bailar, entonces desde que inició el proceso de casada dejó de lado cosas que tal vez hacia antes como era bailar.
“Dancing with The Stars me esta enseñando a bailar y a tener mas resistencia y me ha demostrado que a veces lo que falta es practicar las cosas. En ocasiones uno piensa que no puede pero eso no es así. Somos un grupo donde hay personas de todas las edades”, comentó Moncada.
La empresaria añadió que siente que es una gran experiencia y que realmente el concurso esta muy bien organizado.
“Todos los días nos esforzamos para sacar lo mejor todos los domingos. Ensayamos todos los días de 5 a 6 horas para cumplir y sacar un excelente trabajo. Cuando entro a Dancing me trae recuerdos de cuando tenía 15 años. Siempre me ha gusta el baile, sin embargo, nunca había estado en el mundo de los bailarines profesionales, el cual es hermoso”, destacó la experta en moda.
Moncada comentó que cuando inició a bailar su organismo cambió totalmente y le dio más aire. “Estar en este concurso es todo un reto, tengo compañeras jóvenes, sin embargo disfruto día a día”, añadió.
Amanda Moncada es alguien que le ha puesto una cara buena a todas las circunstancias y es amante de los retos. Considera que su simpatía le ha ayudado a crecer y a encontrar buenos amigos debido a que todo es cuestión de actitud.
Amanda comentó que sus hijas son su mayor adoración y las ama como son.
“La pasión de la moda nació de pura creatividad debido a que siempre me ha gustado combinar y diseñar. Yo estaba estudiando para diseñar interiores, pero un día me salió la opción de comprar una tienda y desde ese momento comenzó la relación de la moda. Me encanta el mundo de la moda cambiante y de encontrarle a la mujer esa fortaleza que tiene en su interior”, manifestó.
La empresaria añadió que comenzó en el mundo de la moda en 1970 en Nueva York, seguí por México, El Salvador, Argentina, porque yo vivía de un lado para otro debido a la carrera de mi marido que era un ejecutivo de Exxon-Mobile.
«Cada año y medio nos trasladaban a través de toda latinoamérica. Yo comencé en los 70 por un favor que le hice a una parienta de mi marido que tenía una boutique aquí en Costa Rica», comentó.
Amanda destacó que en el momento de diseñar siempre piensa en las cualidades de las personas y de resaltar todo lo bueno.
“El momento más difícil de mi vida fue la perdida de mi esposo. Durante su enfermedad tuve que tomar mucha fortaleza porque cuando a uno le toca atender a una persona enferma tiene que ser fuerte para darle una mejor calidad de vida”, comentó.
Entre llanto la reconocida Amanda Moncada comentó que su esposo fue muy querido por su familia porque fue como el padre de todos. “Mi esposo fue un gran amigo y transitó la vida junto a mí y compartimos momentos únicos y que los repetiría sin duda alguna”, manifestó.
“Mi marido durante su enfermedad siempre me dijo que estaba vivo solo por mi”, comentó con una voz quebrada.
Sin duda alguna es un ser carismático, emprendedor y fuerte para tomar las circunstancias de la vida con positivismo.