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Redacción- Por muchos años el ballet se ha percibido como una disciplina para personas esbeltas, de piernas largas, delgadas y muy flexibles. Sin embargo, con el paso del tiempo este deporte ha ido dejando los estereotipos y se ha convertido en una opción para todo tipo de persona que quiera recibir los grandes beneficios éste ofrece.

Según The Brighton Ballet Theater, el ballet en niños provoca diversos beneficios en su estado físico y mental en su etapa de desarrollo, como: aprender a seguir instrucciones, adquirir un sentido de disciplina al hacer nuevas posiciones y pasos, mejora la coordinación, el equilibrio y cómo controlar sus cuerpos en movimiento.

Además, adquieren la costumbre del ejercicio a diario y mejoran la interacción con diversos grupos de personas, lo cual ayuda al desarrollo de su personalidad.


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Por su parte, la profesora de The Darlington Ballet School Costa Rica, Mónika Philippides, explica que la práctica puede iniciar desde los tres años un programa recreativo, ya que a esa edad los niños podrán desarrollar su imaginación, creatividad.

Philippides, menciona que, “su cuerpo por medio del juego y la disciplina se convierten en la mejor combinación para crear y potenciar y/ o desarrollar sus aptitudes. Incluso, hay efectos positivos en términos de disciplina y manejo de emociones en otros entornos. En el caso de los adultos mejora su salud física, flexibilidad, control sobre el cuerpo y fuerza muscular, además de que ayuda al control del estrés”

Tanto para niños como para adultos, los beneficios de la práctica de esta diciplinan puede afectar positivamente muchas áreas de sus vidas, a continuación, explicamos las 5 principales:

1. Disminución de la ansiedad y la depresión: El deporte libera endorfinas, sustancia del
cerebro que provoca sensaciones de bienestar, en el caso del ballet la misma tiene un impacto aún más fuerte en la mente, acompañado del efecto que produce la música clásica.

2. Aumento en la fuerza corporal: A pesar de que los bailarines se ven como personas que “flotan”, los músculos fuertes son una característica de una técnica hecha correctamente. No es solamente un baile ligero, es un entrenamiento constante que necesita una gran
fuerza muscular para realizar el entrenamiento de una manera controlada, fuerte y
elegante al mismo tiempo.

3. Estimula la memoria cognitiva: Cuanto más complejas sean sus sinapsis neuronales, mejor será su memoria. El hecho de tener que recordar pasos específicos, activará automáticamente las neuronas, así como la creación de nuevas vías de estas.

4. Mejora el estado energético en el cuerpo: Al elevar el ánimo y liberar sustancias cerebrales que ayudarán a esto, las mismas provocan que físicamente haya un aumento en la energía después de cada práctica, lo que le ayudará a realizar mejor el resto de sus tareas diarias.

5. Desarrollo en la flexibilidad: Como parte del entrenamiento, el ballet deja una parte importante de cada clase dedicada al estiramiento, lo que ayudará progresivamente a aumentar la flexibilidad del cuerpo e incluso a niveles que ningún ejercicio le ayudarán.

Para realizar esta práctica solamente necesita escoger una academia que preferiblemente tenga amplia trayectoria, respaldo profesional, profesores en formación y actualización constante, apoyo de profesionales con experiencia internacional, y que, sobre todo, se ocupen individualmente de cada estudiante para conocer límites físicos o lesiones que haya que adaptar en la práctica.

“Es importante cuidar cada aspecto, por eso es importante que, si alguien tiene condiciones especiales a nivel físico, sean informadas al profesor para poder trabajarlas de la mejor manera”, agregó Mónika.