Redacción – Playa Blanca, situada en el corazón del Hotel Punta Leona, ha recibido un prestigioso reconocimiento de la revista Condé Nast Traveler, siendo destacada como una de las mejores playas de Costa Rica. Este galardón resalta la belleza y las cualidades excepcionales que hacen de Playa Blanca un destino inigualable tanto para locales como para visitantes internacionales.
Conocida por sus aguas cristalinas y arenas blancas, Playa Blanca se ha convertido en un emblema de tranquilidad y esplendor natural en la región del Pacífico Central de Costa Rica. Rodeada de exuberante vegetación y arrecifes coralinos, esta playa ofrece una experiencia única para quienes disfrutan del snorkel, la natación o simplemente desean relajarse bajo el sol.
El reconocimiento llega en un momento clave para Costa Rica, que continúa consolidándose como un líder en turismo sostenible. Con más de 600 playas a lo largo de su costa, el país es conocido por su firme compromiso con la conservación y el respeto por la naturaleza, valores que Playa Blanca encarna a la perfección.
César Vargas, Gerente de Relaciones Corporativas del Hotel Punta Leona señaló «Desde su fundación en 1975, el Hotel Punta Leona ha puesto toda su dedicación en preservar la riqueza natural que rodea este lugar. Proporcionamos toda la inversión y los cuidados necesarios para que tanto las presentes como las futuras generaciones puedan disfrutar de las maravillas de la naturaleza. Desde que el Programa Bandera Azul Ecológica comenzó en 1996, Punta Leona decidió inscribir a Playa Blanca y ha participado activamente. Estamos orgullosos de que Playa Blanca sea reconocida por su belleza y esperamos seguir compartiendo este paraíso con el mundo.»
El Hotel no solo se enfoca en la conservación del entorno natural de Playa Blanca, sino que también impulsa iniciativas de turismo regenerativo. Este enfoque va más allá de la sostenibilidad, buscando restaurar y mejorar los ecosistemas locales. A través de programas de conservación, protección de la vida silvestre y prácticas de gestión ambiental, el hotel trabaja activamente para revitalizar y preservar los recursos naturales que hacen de Playa Blanca un lugar tan especial.
Entre las iniciativas más destacadas se encuentran los programas de conservación de lapas rojas y tortugas, especies emblemáticas de la región. El hotel colabora con organizaciones locales para proteger los nidos de tortugas marinas y fomentar la reproducción de lapas, contribuyendo al mantenimiento de la biodiversidad y al equilibrio ecológico del área.