POR VOZ DE AMÉRICA
Redacción – Más de 10.000 personas en Haití han sido desplazadas internamente en la última semana, ya que las pandillas armadas que operan en la capital, Puerto Príncipe, y sus alrededores, han aumentado los ataques en áreas que aún no controlan, según estimaciones de la agencia de migración de la ONU publicadas el jueves.
La agencia ha bía dicho a principios de septiembre que más de 700.000 personas estaban desplazadas internamente en la nación caribeña, casi el doble de la cifra seis meses antes.
Las pandillas han estado aumentando en la última semana los ataques en varias ciudades fuera de la capital, donde gran parte de la ciudad y sus suburbios están bajo el control de varios grupos armados violentos, unidos bajo una alianza común conocida como Viv Ansanm.
El conflicto está alimentando el hambre en partes de la población, ya que los grupos criminales organizados toman tierras de cultivo y bloquean las rutas de transporte, mientras que las personas obligadas a huir de sus hogares, a menudo para acoger a familias o campamentos improvisados, ya no pueden depender de ingresos estables para comprar alimentos.
Aunque la ONU autorizó una fuerza internacional para ayudar a la policía de Haití a recuperar el control de las pandillas, la misión ha contado con pocos recursos y ha producido escasos resultados.
El liderazgo de Haití ha solicitado que la fuerza se convierta en una misión formal de mantenimiento de la paz para reforzar los recursos, una iniciativa que fue bloqueada el mes pasado por China y Rusia.
Las pandillas que anteriormente atacaban a la policía nacional, a los grupos de autodefensa civil y a la infraestructura estatal también han comenzado a atacar a vehículos extranjeros.
La embajada de Estados Unidos en Haití dijo a Reuters que el lunes dos de sus vehículos blindados habían sido atacados por disparos de pandillas.
Uno fue alcanzado por múltiples balazos, aunque nadie resultó herido.
Un helicóptero de la ONU con 18 personas a bordo también fue atacado y alcanzado por múltiples balazos el jueves, aunque tampoco hubo heridos, informó el Miami Herald. La oficina de la ONU en Haití no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.