Redacción – Los funcionarios de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) han colocado 1 007 719 vacunas contra la influenza estacional durante la jornada que, actualmente, realiza la institución. Esto según el corte realizado este miércoles al medio día.
Según explicó la doctora Leandra Abarca Gómez, coordinadora del Programa Ampliado de Inmunizaciones de la CCSS, las acciones realizadas por el personal de salud en todo el territorio nacional y el interés mostrado –principalmente en los últimos días- por la población han permitido que, a la fecha, solo reste colocar 101 355 dosis de vacuna pediátrica (presentación de 0,25 ml) que se utiliza para los menores con edades entre los 6 meses y los 3 años, y 190 906 dosis de la presentación de 0,5 ml con la que se protege a las personas mayores de 3 años de edad.
La doctora Abarca realizó un llamado especial a las personas que aún no se han vacunado y que por sus condiciones de salud deben hacerlo para, incluso, no poner en riesgo su vida.
«Aún nos falta proteger a muchas personas de los grupos de riesgo por enfermedad, principalmente a cardiópatas, personas con obesidad, personas con enfermedades respiratorias crónicas y diabéticos. A ellos les pedimos que se acerquen a los servicios de salud este jueves y viernes a recibir la protección, pues la influenza es una enfermedad que puede complicarles su salud e incluso ocasionarles la muerte», comentó la doctora Abarca.
El corte de datos de este miércoles muestra que los cardiópatas poseen una cobertura de vacunación del 28% del total de la población meta definida al inicio de la jornada, las personas con obesidad (tipos II y III) una cobertura de 47,5%, los diabéticos una de 56% y las personas con enfermedades respiratorias crónicas una cobertura de 66%.
La influenza estacional es una enfermedad respiratoria contagiosa provocada por virus, que puede presentarse en formas leves o graves y que en ocasiones puede llevar a la muerte. Fiebre, tos, dolor de garganta, mucosidad nasal o nariz tapada, dolores musculares y corporales, dolores de cabeza, fatiga (cansancio) y en algunos casos (principalmente en niños) vómitos y diarrea, son parte de sus síntomas.
Para la jornada de 2017, la CCSS invirtió $5 millones en la adquisición de 1,3 millones de dosis.