Redacción / Agencias – Miles de cubanos y extranjeros se reunieron este viernes en La Habana para el histórico concierto gratuito de los Rolling Stones.
Los fans hicieron fila durante horas para poder acceder al complejo de la Ciudad Deportiva de la capital cubana.
El concierto llegó justo después de la histórica visita del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y es visto como otra señal de cambio en la isla socialista.
Hasta hace unos 15 años, el gobierno de Cuba prohibía la mayor parte de la música rock y pop al considerarla decadente y subversiva.
Media hora antes de que Mick Jagger saliese al escenario, cientos de miles de cubanos eufóricos esperaban el concierto que selló la apertura cultural de Cuba al mundo y del mundo a Cuba.
Edelix Fonseca, profesor de ajedrez de 54 años, bebía ron con café tumbado en el pasto y dijo al diario español El País: «Cuando yo era un adolescente en los años 70, me gustaba llevar el pelo como nos tocaba a los negros en esa época, como lo llevaron Jimi Hendrix y Angela Davis».
A las 20:38, se escuchó: «Ladies and gentlemen, the Rolling Stones!» y el cantante de la lengua más famosa de la historia del rock&roll, junto a sus inseparables compañeros de arrugas Keith Richards, Ronnie Wood y Charlie Watts, apareció ante Cuba para cantarle a una nueva era.
Mick Jagger fue ovacionado por las miles de personas que acudieron al concierto. «El tiempo cambia todo», dijo al llegar al aeropuerto de La Habana.