- Pluses salariales son más altos que los propios salarios
Redacción – Casi la mitad del presupuesto total del Poder Judicial se gasta en pluses salariales que reciben los más de 11 mil funcionarios que atienden la justicia del país.
Según datos oficiales de la Contraloría General de la República, los empleados judiciales recibieron solo el año anterior por concepto de incentivos 147 mil millones de colones.
Los pluses que generan ese gasto multimillonario son por concepto de anualidades, carrera profesional, dedicación exclusiva, prohibición, capacitaciones y el reconocimiento por el tiempo servido en otras instituciones.
Estos incentivos se convirtieron en el principal disparador del gasto en el presupuesto del Poder Judicial, el cual para el 2015 fue de 367 mil millones. Es decir, el 40 por ciento del dinero destinado para el sistema de justicia.
Con estos datos, y tomando en cuenta los datos correspondientes a los últimos cinco años, los incentivos salariales de los trabajadores del Poder Judicial se han incrementado en un 69 % desde el 2010 hasta el 2015.
Sobre el monto en incentivos, el director de Gestión Humana del Poder Judicial, José Luis Bermúdez, dijo que el sistema de clasificación de puestos y las remuneraciones asociadas, responde a la naturaleza de las distintas funciones y responsabilidades que tiene cada una de las clases de puestos.
Asimismo, indicó que el Poder Judicial debe retribuir a éstas personas trabajadoras por las implicaciones de la dinámica laboral impuesta con el costo que significa en las remuneraciones.
Pese a la explicación dada por el director de Gestión Humana, las críticas no se hacen esperar.
El jurista Juan Diego Castro explicó que el Poder Judicial es un “monstruo” al que no se le puede señalar nada.
“Como es posible que en este país tan pequeño hayan 44 magistrados, 22 en propiedad y 22 suplentes, mientras que en otros países hay nueve o menos”, señaló el abogado.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Ingreso y Gasto Público de la Asamblea Legislativa, Mario Redondo, expresó que le preocupa que no haya cultura de austeridad en la administración pública.
“Me preocupa por la absoluta falta de cultura de austeridad de administración pública costarricense y que se manifiesta en algunas entidades, entre ellas el Poder Judicial. Nosotros hemos señalado evidencia a través de los permisos con goce de salario y otros privilegios que tenemos condiciones absolutamente discrepantes con los demás trabajadores.”
