Redacción-Aunque durante el mes de octubre hay mucha información, sensibilización, campañas y  actividades sobre del tema del cáncer de mama, son muy pocas las mujeres en Costa Rica que tienen el hábito de hacerse el autoexamen todos los meses.

Según cifras del Ministerio de salud, el año pasado murieron 317 mujeres en Costa Rica por cáncer de mama y según la Organización Mundial de la Salud, una de las razones de la mortalidad puede explicarse principalmente por la falta de prevención, “que hace que un alto porcentaje de mujeres acudan al médico con la enfermedad ya muy avanzada”.

Para el Dr Alejandro Mora, de Alter Life Science “esto responde a la poca cultura de prevención que tenemos en nuestros países y realmente hacerse el examen de manera adecuada puede ser la diferencia entre la vida y la muerte, pues si una mujer se detecta un tumor a tiempo,  puede tener hasta un 90% de probabilidades de sobrevivir”

La Organización Panamericana de la Salud, en su Informe del 2011, señala que llevar un estilo de vida más saludable, podría prevenir cada año hasta 2,8 millones de casos nuevos de cáncer. Además del autoexamen, existen otros hábitos  que pueden ayudarle a mejorar la prevención en su familia:

  • Conozca su historia familiar

Los factores hereditarios son importantes. El riesgo de padecer cáncer de mama se eleva si se tiene un familiar de primer grado de consanguinidad con cáncer de mama u ovario, y es más fuerte aún si son dos familiares. Es especialmente importante saber si la aparición del cáncer de mama en el familiar fue a una edad anterior a los 50 años.

  1. Hágase el autoexamen de manera regular

Cinco minutos al mes no es mucho tiempo para realizarse a un autoexamen de mamas, el cual debe ser aplicado con movimientos circulares, tratando de detectar la aparición de una anomalía como un nódulo o pelotita. Actualmente existe tecnología que puede ayudarnos a detectar con mayor precisión la aparición de cualquier anomalía, como el guante Sensifemme.

  1. Realice actividad física

La ciencia médica ha encontrado evidencia de que la realización de actividad física reduce el riesgo de cáncer de mama. Aunque todavía no se ha logrado cuantificar la cantidad de ejercicio necesaria para reducir el riesgo de forma evidente, lo cierto es que se aconseja tener actividad de regular a baja intensidad por los menos 30 minutos diarios.

  1. Evite el fumado y consuma alcohol con moderación

Ampliamente demostrado el tabaquismo es un factor que acelera la aparición de todo tipo de cáncer. Aparte de esto, el consumo de alcohol, especialmente en mujeres postmenopáusicas, eleva el nivel de riesgo, se señala que las mujeres que consumen de 2 a 5 bebidas alcohólicas al día tienen un incremento del riesgo de 1,5 veces.

  1. Cuide su alimentación 

Una dieta rica en fibra y baja en grasas, en la que exista consumo de frutas, verduras y cereales integrales, no solo favorece el bienestar físico sino que reduce la tendencia a la obesidad que es un factor de riesgo muy importante en la elevación del riesgo de padecer cáncer de mama, especialmente en mujeres posmenopáusicas.

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