San José – La apertura -en el 2015- del mercado del cemento en Costa Rica provocó que los precios de este producto cayeran hasta un siete por ciento, según datos suministrados por el Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC).
Y es que hace exactamente dos años, la administración Solís Rivera modificó la reglamentación existente que, por años, bloqueó la importación de cemento al país basada en una norma que obligaba a utilizar el producto 45 días después de su empaque.
«Revisamos los reglamentos internacionales y solo en Costa Rica existía esa regla que no tenía un sustento. Por eso fue eliminada», explicó Welmer Ramos, entonces ministro de Economía a cargo de esa modificación.
En mayo del 2015, el presidente Luis Guillermo Solís presentó la ruptura del oligopolio del cemento como uno de los principales logros de su gobierno. El discurso fue pronunciado ante la Asamblea Legislativa.
Ese cambio en la regulación eliminó la norma de que todo tipo de cemento tenía una vigencia de 45 días, la cual imposibilitaba el ingreso de este producto de otras partes del mundo.
Con el cambio, hubo una apertura real del mercado del cemento, manejado en su momento solo por Cemex y Holcim, pues amplió las oportunidades para que otras empresas importaran y comercializaran este producto.
«Cuando en 2014 tomamos la decisión de ponerle más competencia al mercado, se frena el crecimiento de los precios y cae, ha caído más del 5%. Eso era lo que nosotros queríamos frenar, esa escalada de precios, haciendo un mercado más abierto, porque desde la reglamentacion técnica se frenaba la incursión de otros actores, antes la había pero tenía una mayor restricción», comentó Welmer Ramos.
Por su parte, la Cámara de la Construcción Costarricense definió la medida tomada por este Gobierno como positiva, pues el comportamiento del mercado de este producto -desde el cambio en la norma- específicamente en temas de precios, benefició al consumidor final.
“La competencia ha demostrado en la práctica que hay un mejoramiento en las condiciones de precio y de servicio. En el caso del cemento no ha sido la excepción y sí hemos notado que tenemos una tendencia del precio a la baja, de hecho, para el 2016 el precio decreció en precio casi un 6%, a eso hay que sumarle un aumento en las importaciones, lo cual genera un efecto de competencia”, adujo Rándall Murillo, director ejecutivo de la Cámara de la Construcción.
De igual manera, la Cámara de Comercio señala un comportamiento competitivo en el mercado del cemento que benefició a los consumidores.
Según esta Cámara, antes de la apertura del mercado un saco de 50 kilos tenía un costo aproximado de 6.800 colones, mientras que actualmente tiene un precio promedio de 5.000 colones.
“La apertura del mercado del cemento ha significado un impacto positivo en términos de precios, lo cual beneficia a los comerciantes y, principalmente, a los consumidores. Pese a los beneficios tangibles, es necesario re
Irene Campos, del Instituto Nacional de Cemento, dijo a este medio que esa institución no mide el comportamiento del mercado de este producto, aunque sí reconoció que hubo una apertura real.
No obstante, fue clara en que esa entidad continúa con serios cuestionamientos sobre la resistencia del cemento importado.
Holcim, una de las dos únicas empresas productoras de cemento en el país, señaló -con cautela- que son respetuosos de la libre competencia, aunque no reconocieron si tuvieron una baja en las ventas luego de la modificación en la norma.
“Es importante promover una competencia sana, ya que es vital para mantener el dinamismo en el sector. Además, nos permite seguir en una constante innovación, así como ofrecer un mayor valor agregado que en definitiva satisface las necesidades de nuestros clientes”, mencionó Tatiana Salas, coordinadora de comunicación corporativa de Holcim.
Por la apertura de la competencia, esta cementera se vio en la obligación de generar otro tipo de cemento a menor costo como el producto llamado Cariari, con el fin de competir; sin embargo, Holcim niega que esa marca haya nacido con tal objetivo.
“Es una alternativa más de nuestro amplio portafolio, el cual desarrollamos para darle más opciones a nuestros distribuidores y clientes. Basamos nuestra posición competitiva en brindar soluciones a nuestros clientes que generen valor agregado”, aseguró Christian Dedeu, director comercial de Holcim Costa Rica.
Este medio envió consultas a la cementera Cemex, otra de las empresas que dominaban el mercado antes del cambio de la norma. Andrés Bolaños, director de Planeación, dijo mediante correo electrónico que prepararían una declaración; sin embargo, no se recibió respuesta alguna al momento de publicar.
Por otra parte, la empresa Sinocem, una de las compañías que se abrió campo en el país con la importación de cemento, reconoce un gran beneficio para el consumidor, pues -desde su llegada- se comercializa un producto de calidad y a bajo costo.
Asimismo, Juan Carlos Bolaños, presidente de Sinocem, denuncia una competencia desleal que pretende afectar el mercado.
«Lo más complicado ha sido la persecución de nuestros envíos y entregas a nuestros clientes, nos hemos topados con casos donde motociclistas rompen los sacos que se transportan. Existen unos sospechosos que están ubicados todos los días a 100 metros de nuestras bodegas. Esto ya fue denunciado ante nuestros tribunales de justicia, a espera del respaldo de las autoridades a fin de normalizar la libre competencia», señaló.
Sinocem inició operaciones en el 2015, año en el cual importaron dos barcos de cemento procedente de China. Para el año siguiente, ya fueron cinco barcos con cantidades mucho más grandes que, hoy, alcanzan al menos el 5% del mercado nacional.
En cuantos a los cuestionamiento referentes a la calidad del producto, Bolaños fue contundente al indicar que existen pruebas de laboratorios que muestran la alta calidad del producto importado de China, contando aún con mayor resistencia que el fabricado en Costa Rica.
Comercio refleja beneficios. Distribuidores de productos de cemento también ven un beneficio real luego de la gestión realizada hace dos años. Tal es el caso de la Ferretería El Rafaeleño, establecimiento que comercializa cemento importado.
“El cemento importado es el que vino a poner un poco de diferencia a nivel nacional, pues era evidente que Cemex y Holcim eran los únicos en el mercado. El importado, además de que vino a ser más competitivo, pues en realidad había un monopolio, vino a implantar un precedente en el mercado. Las grandes cementeras se han visto obligadas a bajar precios por la entrada del cemento chino y por calidad, sinceramente se prefiere Sinocem”, añadió Wilberth Prado, administrador de El Rafaeleño.
Por su parte, el diputado Otto Guevara, del Movimiento Libertario, quien promovió el cambio en la norma a finales de 2014, señaló que el mercado se ha visto realmente competitivo y ha beneficiado a los costarricenses en cuanto a precios.
“Me siento muy orgulloso del trabajo que hicimos para que ese mercado se abriera. Fue precisamente una denuncia que yo hice sobre esas barreras y con ello, vino el cambio en la normativa. Permite que haya más competencia y obviamente cuando hay más competencia, hay variedad de productos, y el precio probablemente baja, que es lo importante”, agregó Guevara.
La misma posición mantiene el diputado de la Unidad Social Cristiana, Johnny Leiva, quien considera beneficioso la apertura del mercado.
«Yo creo que todo lo que sea competencia es conveniente para los consumidores para poder buscar mejores precios y la apertura del mercado del cemento ha venido también a buscar como los precios tiendan a bajar o mejorarse. Toda competencia es conveniente y sana en cualquier producto», señaló el socialcristiano.
AMPrensa.com realizó una consulta al Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA) para obtener una reacción sobre el comportamiento comercial de este producto; sin embargo, en la oficina de prensa indicaron que el director ejecutivo estaba fuera de la oficina y no podía dar su reacción.
Por ello, recomendaron acudir a otras instituciones como las mencionadas en esta nota, pese a que el CFIA es una institución clave en la supervisión y regulación tanto del comercio como de la calidad de este tipo de productos.
DIPUTADOS OPINAN
Luis Vásquez, PUSC
Víctor Morales, PAC
Rolando González, PLN
Gonzalo Ramírez, RC
En realidad el precio del cemento debería rondar los 3.500 colones.
Me deja muchas dudas este tema, si están tan seguros de la persecución, entonces procedan legalmente y listo. A mi me parece que mas es un tema de que este tercer competidor se va a terminar uniendo con los productores actuales y termina siendo uno mas del grupo. Porque no dejan que entre el cemento de Guatemala ? porque es mas barato inclusive que el sinocem !!!!! a ver, habran el mercado de verdad entonces.
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