Redacción – Ante la expectativa de lo que se presagiaba como una gran problemática que provocaría la construcción del nuevo puente de ‘la platina’, el servicio de tren a Alajuela-San José llegó en el momento preciso para intentar mitigar las interminables presas.
El anuncio de cierre del puente, ahora llamado Alfredo González Flores, hace ya más de un mes, alarmó a los conductores que hacen uso de la transitada vía a diario, trajo consigo una serie de medidas de mitigación para tratar de frenar el impacto que este cierre podría tener en el tránsito, comercio y movilización de personas.
Los trabajos en el puente arrancaron el pasado 21 de enero, y fue dos días después, cuando apareció el tren que ahora brinda el tan esperado trayecto entre Alajuela y San José.
Las autoridades no demoraron en tomar este nuevo servicio como medida para intentar evitar el congestionamiento vial en ese sector, aunque el mismo día de la inauguración del servicio reconocieron, tanto Carlos Villalta, ministro de Obras Públicas y Transportes, como el presidente ejecutivo del Incofer, Christian Vargas, que el servicio no daba a basto.
Fue entonces cuando valoraron aumentar la frecuencia de los horarios.
A más de un mes del inicio de la construcción del nuevo puente, de acuerdo con María Fernanda Arias, vocera del Incofer, el servicio sí ha cumplido con las expectativas, a pesar de los inconvenientes que tuvieron en un inicio.
«Luego de cuatro semanas de tener el servicio continuo de tren entre Alajuela-San José, hemos notado que el promedio de pasajeros que suben en la estación de Alajuelas es de mil a 1100 personas diarias; en un principio, era un servicio que estaba funcionando de forma directa entre Alajuela y San José, y notamos que los trenes estaban quedando con bastante capacidad, por lo que decidimos habilitar todas las paradas del tren», señaló Arias.
Además, de acuerdo con Arias, el servicio ha funcionado de una manera esperada ya que el flujo más importante de personas que utilizan el servicio no es el de las que viven en Alajuela, más bien se trata de las personas que viven en Heredia.
«Sabemos que estamos pasando por una situación temporal y atípica. Estamos esperando que los trabajos en el puente concluyan para poder determinar cuál va a ser el comportamiento real de las personas que viven en Alajuela», concluyó la funcionaria.
Por su parte, usuarios del transporte público, consideran que la medida de llevar el tren a Alajuela, si ha ayudado de forma considerable a mitigar la problemática de las presas en Alajuela, ya que al tener un servicio adicional al de los buses, las presas provocadas por los constantes cierres en carretera se han logrado controlar.
De manera que, de acuerdo con las autoridades, las medidas adoptadas por el tren si han cumplido con su objetivo, ya que el flujo de pasajeros que utilizan el servicio de tren ha aumentado considerablemente durante la construcción de la nueva estructura que tantos dolores de cabeza le ha traído a la población.