Redacción- Un zoológico japonés sacrificó 57 monos tras haber descubierto que eran portadores de genes de especies «exóticas invasoras», anunciaron este martes las autoridades.
El Takagoyama Nature Zoo de Chiba, en la periferia este de Tokio, tenía 164 monos que, según creía la organización, eran puros macacos japoneses.
Sin embargo, el operador y los responsables locales descubrieron que alrededor de un tercio de ellos eran descendientes de un cruce con el macaco Rhesus (Macaca mulatta).
Esta variedad de mono está incluida en la lista mundial de especies amenazadas, según la Unión Internacional para la Conservación (UICN), pero en Japón el macaco Rhesus está clasificado como una «especie exótica invasora».
La administración del zoo informó haber organizado una ceremonia en un templo budista cercano para el reposo de las almas de los monos.