Redacción- Conforme las personas envejecen los temas relacionados a las enfermedades son  más comunes, y sin duda, una de las más temidas es la demencia.

“De los adultos mayores con demencia, hasta un 10% de ellos sufren de hidrocefalia, un tipo de demencia  potencialmente  reversible, pero que lamentablemente con frecuencia no es sospechada ni diagnosticada”, puntualizó, el Dr. Eduardo Huertas, Cirujano Neurológico del Centro Neuro Espinal.

 La demencia es un padecimiento devastador, y cuando un ser querido es diagnostico con esta enfermedad, el panorama se torna sombrío. Normalmente su pronóstico es muy reservado, ya que es una enfermedad progresiva e irreversibles, a excepción de la demencia causada por hidrocefalia.

Conocida como hidrocefalia de tensión normal, ésta es una enfermedad que consiste en el cúmulo de líquido cefalorraquídeo en la cabeza. Cualquier persona, independientemente de su edad o género, está propenso a padecerlo. No obstante, su presencia tiende a ser más común en adultos mayores.

De acuerdo con lo que explica el Dr. Eduardo Huertas, Cirujano Neurológico especialista en cerebro y columna, en todo adulto mayor con demencia debe descartarse hidrocefalia, ya que ésta es reversible, pero raramente se hace y muchos pacientes no son diagnosticados oportunamente.

¿Cuáles son los principales síntomas del padecimiento en la población adulta mayor?

Aunque los síntomas a menudo comienzan de forma lenta, estos son los principales que podrían suponer acumulación de líquido cefalorraquídeo en el cerebro: el paciente puede presentar anomalías al caminar, disfunción cognitiva (demencia) e incontinencia urinaria, en lo que se conoce como “Triada de Hakim”.

Estos dos síntomas se asocian además a deterioro de la capacidad intelectual, incluyendo pérdida de la memoria y desorientación progresiva.

 Su diagnóstico tiende a dificultarse aún para médicos experimentados, porque sus síntomas inician de forma lenta e insidiosa.

De ahí que es importante que aquellos miembros de familia, trabajadores sociales y demás,  que se dedican al cuido de estas personas, presten atención a la sintomatología anterior, pues una omisión o carencia de una evaluación temprana, podría causar una lesión grave en la salud.

¿A qué tipo de tratamiento se someten las personas que han sido diagnosticadas con hidrocefalia? 

Una vez que se da la detección oportuna tras la realización de minuciosos exámenes médicos, los adultos mayores diagnosticados deben ser  sometidos a una cirugía de derivación del líquido.

Este es un procedimiento que se practica miles de veces alrededor del mundo, y es uno de los más seguros, según lo explica el Dr. Huertas, por su carácter casi ambulatorio, estancia de un día y una rápida recuperación.

 Prácticamente, lo que hace la intervención médica es redirigir el líquido originado en el cerebro a otra parte del cuerpo, con lo que las cavidades agrandadas del cerebro vuelven  a su tamaño original y con ello revierten los síntomas, así como la reversión de daños.

Lo maravilloso de este procedimiento es que todos los pacientes que lo atraviesan, revierten sus discapacidades relacionadas con los síntomas y tienden a llevar, posterior a la recuperación, una vida normal.

Como parte de un seguimiento exitoso tras la recuperación, es importante recordar que parte del tratamiento es la colocación de una válvula (que funciona automáticamente), pero que en la mayoría de los casos solo requiere controles anuales.

Causas.  Las causas de la hidrocefalia del adulto pueden ser muy variadas:

  • Sangrado de un vaso sanguíneo o aneurisma cerebral
  • Golpe craneoencefálico
  • Infecciones virales o bacterianas
  • Cirugía cerebral previa

Sin embargo, la causa más frecuente es desconocida o idiopática. La causa de la hidrocefalia de tensión normal, típica del adulto mayor aún se desconocen, pero su tratamiento es ahora muy exitoso.

Con el incremento de la prevalencia de demencia en el mundo, y sobre todo en los países en desarrollo, se debe dar mayor atención a la evaluación diagnóstica temprana de pacientes con demencia, particularmente para procurar aquellos que sean tratables y potencialmente reversibles.