Redacción- Un día del año 2014, un joven que nació en Lomas del Río, Pavas, generó una idea con un único fin: ayudar financieramente a todas aquellas personas que necesitaban un pequeño préstamo para reparar sus casas, pero que los bancos excluían de cualquier crédito.

La idea nació por una vivencia personal. Erick Mora vio como su padre no pudo darle mantenimiento a su casa durante años, generando todo un caos principalmente en el invierno.

Erick Mora (de pie), fundador del Banco de Mejoras.

“Mi casa se inundaba por completo. Habían goteras, una humedad por todas partes que nos enfermaba. Mi papá era misceláneo en el San Juan de Dios, pero los bancos no tienen opciones para personas como él. Fue hasta que se pensionó, con la platita que le dieron, que pudimos arreglar la casa”, recordó Mora, hoy fundador del Banco de Mejoras.

Lo vivido durante años, llevó a este emprendedor –hoy con una maestría en economía- a diseñar una modalidad de préstamos pequeños, a una tasa baja, para aquellas personas  que por diferentes razones no pueden acceder a un banco. El sostén de su idea está en la Responsabilidad Social Empresarial.

“Hay personas que trabajan en lo propio y no pueden cumplir con todo lo que pide un banco. Una simple certificación de ingresos cuesta ¢50.000 y eso es mucho dinero para muchas personas que necesitan con urgencia una mano para arreglar su hogar”, recalca Mora.

Aquella idea se plasmó en un papel y fue inscrita en el concurso “Yo emprendedor”. Pasó todos los filtros y llegó a la final en noviembre de aquel 2014. La idea impresionó al jurado y ganó el primer lugar.

A partir de ese momento, llegaron los primeros patrocinadores para poner en marcha aquel sueño de ayudar al taxista, al panadero, al constructor…

Más de 237 personas esperan a la fecha recibir un crédito en estos momentos.

“¿Por qué no plantear acceso a un crédito y asistencia técnica, pero no a través de un banco? Es ahí donde entra la parte privada. El banco no hace captación de fondos, es una empresa social en donde los dueños no tienen ganancias y los ingresos se reinvierten”, explica el fundador.

La idea de Erick Mora es involucrar a los eventuales proveedores. Es ir más allá de la responsabilidad social, es una inversión social estratégica. Se soluciona un problema y se obtiene una ganancia. Es decir, aquella empresa que se une recibirá un beneficio.

“Por ejemplo una empresa que vende zinc y se une al proyecto se verá beneficiada porque cuando haya que remodelar un techo, la plata que aportó se usará para comprarle el material. Hay un retorno”, asegura el economista.

Con ese panorama, ya varias empresas importantes se unieron al Banco de Mejoras, el cual otorgó su primer crédito en octubre anterior. A la fecha, 20 personas se han visto beneficiadas y otras 237 están aplicando para un préstamo.

Cuando una familia solicita el crédito, un equipo de especialistas (voluntarios) realizan una evaluación y fijan las mejoras que la casa necesita. Basados en ese plan, se establecen prioridades y el monto del préstamo.

Actualmente, el máximo de un crédito son $2000 para materiales y el máximo para pagar son 24 meses. La mano de obra debe ser aportada por la familia.

Cada negocio o empresa que se una al Banco de Mejoras verá como su aporte tendrá un retorno positivo. Además, ayudará a que otros vivan mejor.

En Costa Rica, según estudios, el 51% de las casas necesitan  una mejora. Las principales carencias están en las instalaciones eléctricas.

“El principal causa de incendios es el mal estado de las instalaciones y la gente no las arregla porque no quiere, sino porque no puede por la falta de herramientas financieras. Ahora con el Banco de Mejoras buscamos ayudar a estas personas que se comprometen a pagar su deuda para que otros también tengan acceso a esta ayuda. Ese es el trato”, dice Mora.

Si usted desea unirse como empresa a esta causa o solicitar un crédito puedo ingresar a www.bdmcr.org y llenar los formularios.