Redacción- El tiempo pasa, pero pocos olvidan aquel gol de Costa Rica ante El Salvador en el viejo Estadio Nacional que puso a Costa Rica, por primera vez, en un mundial de fútbol.
Hoy, 28 años despúes, el artífice de esa anotación rememora con nostalgia aquel momento de gloria, aunque considera que no le dejó nada en su vida, más que el cariño de quienes lo recuerdan. Sí, hablamos de Pastor Fernández, un hombre que dedicó su juventud al fútbol y que ahora vive de su propia empresa: una tienda de uniformes.
Fernández empezó su carrera en 1983 en segunda división con Peréz Zeledón y más tarde pasó a las filas del Cartagines, Liga Deportiva Alajuelense y San Carlos. Se retiró del balompié después de cinco temporadas en la máxima categoría a la edad de 28 años.
Y se convirtió en un héroe del deporte nacional durante la clasificación para la Copa Mundial de 1990, cuando se dirigía en el gol de la victoria contra El Salvador; que la victoria permitió a Costa Rica para calificar para su primera Copa del Mundo.
AMPrensa.com conversó esta tarde con Pastor Fernández y nos dijo lo siguiente:
¿Qué ha sido del emblemático jugador que llevó a Costa Rica al primer mundial de fútbol?
«En la parte deportiva no es mucho lo que podemos contar, ya que prácticamente, despúes de eso, solo fueron dos años más que jugué al fútbol. Estuve retirado y hasta olvidado porque en realidad, acá en este país, es así, pero yo continúo con mi vida, con mi trabajo, con mi familia y siguiendo adelante como tiene que ser».
¿Sigue ligado al fútbol nacional?
«Estuve ligado algún tiempo e inclusive dirigí en segunda división a Sagrada Familia, pero luego me aparte y trabajé en ligas menores con niños en escuelas privadas y ahora me dedico a la cofección de uniformes deportivos, que es la empresa que tengo»
¿Cómo empresario qué tal le ha ido?
«El fútbol a mí no me dejó ingresos suficientes como para poder haber hecho un colchón para empezar hacer la empresa y todo lo he tenido que ir haciendo con mucho esfuerzo. Con el mismo trabajo y el aporte de los mismos clientes espero que esta empresa sea más sólida y fuerte en un futuro próximo»
28 años despúes de aquel redordado cabezazo, ¿qué representa ese gol para usted?
«Fue un momento en mi vida que realmente me marcó, todavía hoy 28 despúes encuentro gente que me saluda, me reconoce por ese gol, pero únicamente es la satisfacción de haber sido parte de la historia del balompié de Costa Rica. Ese cariño que guarda la gente para uno, fuera de ahí, no representa absolutamente nada. Al final de cuentas los beneficiados de lo que podía representar ese gol han sido otros y seguirán siendo otros, a mí en lo personal no me ha traído ningún beneficio, representa que eres conocido, que la gente te reconozca y tengan un cariño especial para mis hijos y es lo único que puedo decir que en estos 28 años lo que representa esa anotación»
¿Hay resentimiento en Pastor Fernández por haber quedado fuera de la lista final del Mundial de Italia 90?
«Hablar de resentimientos a estas alturas ya no tiene ningún sentido, si le queda a uno ese mal sabor de boca, el balompié de Costa Rica es uno antes y es otro despúes del Mundial de Italia 90. Ese gol vino a marcar una era en el fútbol nacional y vemos que, 28 años después, hemos visto el avance notorio que ha tenido nuestro balompié.
La parte que corresponde en ningún momento se ha mostrado agradecida conmigo, me imagino que por ser una cuestión colectiva, yo reconozco que no fue una obra solo de Pastor Fernández, fue una obra de todos los jugadores que, en ese momento, participamos en ese proceso. Algunos se vieron beneficiados, ya que se le reconoció un poco la participación en la justa mundialista y hubo otros, como yo, que no. Aveces me preguntó ¿para qué hice eso? Dios para todos tiene un camino, me pasó las de Moíses porque me tocó ser parte del grupo, pero nunca me dejaron entrar a la tierra prometida, es algo que solo Dios sabe porqué pasó lo que pasó.»
«Diferencias no hay, lo que hay es más preparación física, no hay ninguna diferencia importante, el fútbol sigue siendo el mismo, se trata de jugar y de marcar. Lo que sí ha cambiado es la apertura, hace 28 años acá no habían cazadores de talentos ni habían supervisores. Usted firmaba un contrato y lo firmaba usted directamente, nadie tenía representante, ahora mientras usted juega, anda un representante con 20 vídeos suyos ofreciéndolo en el fútbol internacional, eso no había antes, pero bueno esas fueron las cosas que dejó la participación de Costa Rica en su primer copa del mundo».
¿Qué opina de la selección actual y cree que llegaremos al Mundial de Rusia 2018?
«Costa Rica lo tiene todo y prácticamente ganando estos dos juegos venideros, sumaría 13 puntos y estaría práctimente a las puertas de la clasificación al mundial, por dicha se tiene una muy buena camada de jugadores. Lo preocupante no es ahorita, lo preocupante es el próximo mundial, no ve uno una camada nueva de jugadores para que venga a suplir a estos jugadores actuales que tienen una gran calidad.
Esta selección tiene otro nivel, hay jugadores capacitados para sacar adelante cualquier partido sin importar el adversario que tengan al frente, tenemos un jugador bicampeón de la Uefa Champions League como lo es Keylor Navas y eso dice mucho de la selección.
¿Cómo analiza a los jugadores que hoy componen la selección?
«Lo mas importante es la educación que han tenido los jugadores que hoy forman parte de la selección nacional, esto no lo tenían las generaciones pasadas de jugadores costarricenses y eso se llama profesionalismo. Han conocido y se han rozado al lado de grandes jugadores y eso les permite conocer y contagiarse de profesionales del fútbol.
La oportunidad de rozarse con jugadores de otro nivel es una oportunidad de convertirse en mejor futbolista y lo más importante es eso, convertirse en futbolista a tiempo completo y eso ha marcado un antes y un despúes para los jugadores de nuestro balompié nacional».