El hidrogeno potencial (pH) es la medida utilizada para identificar el nivel de acidez en el cuerpo, es una escala que va del 1 al 14, por debajo del 7 es ácido y por encima es alcalino. En el caso del cuerpo humano la acidez ideal es 7,35 a 7,45.
Es importante considerar que la alcalinidad de los alimentos no tiene que ver con su sabor, por ejemplo el limón tiene bajo nivel de acidez, esta clasificación se refiere al efecto en el cuerpo y no en el paladar.
“Para mantener un buen estado de salud es recomendable conservar el organismo con un nivel alto de alcalinidad, ya que cuando se sufre un desequilibrio del pH puede surgir una enfermedad. Llevar una dieta alcalina ofrece beneficios como la prevención de múltiples de patologías y la aparición de ciertos padecimientos”, explicó Nathalie Solera, nutricionista.
Algunos beneficios de integrar alimentos alcalinos en la dieta, son:
El retraso de la pérdida ósea, ya que ayuda a preservar los huesos.
Mantenimiento de la masa muscular, porque favorece la producción de hormonas.
Prevención de algunos problemas renales como cálculos o «piedras» porque elimina las toxinas que los producen.
Ayudan a la correcta función cardiovascular, previniendo a futuro problemas del corazón.
Puede prevenir la diabetes tipo 2 porque los alimentos alcalinos son de bajo índice glicémico esto quiere decir que mantienen los niveles de glucosa sanguínea adecuados.
Estos son varios alimentos con una alcalinidad mayor a 7: el ajo, jengibre, curry, canela, espárragos, brócoli, berros, zanahoria, coliflor, apio, pepino, acelga, remolacha, berenjena, lechuga, culantro, hongos, Stevia, frijoles verdes, chile dulce, espirulina, alfalfa, cebolla, hojas de mostaza, tomate, sandía, coco fresco, mandarina, fresas, moras, limón, melocotón, pera, piña, toronja, melón, nectarina, naranja, manzana, aguacate, pechuga de pollo, queso tipo cottage, tofu, linaza, polen de abeja, té verde, agua mineral, jugo de manzana, lecitina de soya, miel cruda y aceite de oliva.
“Si bien la dieta alcalina tiene muchos beneficios, no están relacionados solamente al pH del alimento, sino también a que son bajos en grasas y azúcares, pero altos en vitaminas, minerales, antioxidantes y otros nutrientes importantes para nuestro organismo” explicó Solera.
Recuerde que una dieta saludable no implica dejar de comer todo tipo de productos, sino aprender a consumirlos de forma adecuada y en las porciones recomendadas por su nutricionista.