Redacción- María de los Ángeles Castillo Alemán celebró los 10 años desde que recibió un nuevo corazón que le dio una segunda oportunidad de vida: el 30 de agosto de 2007, le practicaron el trasplante cardíaco en el hospital Dr. Rafael Ángel Calderón Guardia.
Doña María fue la primera paciente trasplantada de corazón en este centro médico y desde entonces hasta la fecha otras 31 personas han recibido un trasplante cardíaco practicado en ese establecimiento de salud.
Tenía 42 años cuando a los quince días de tener a su hija, hoy de 11 años, sufrió quebrando de salud por el cual estuvo varias veces internada en el hospital Tony Facio, el diagnóstico médico fue una enfermedad cardíaca denominada miocardiopatía periparto que se sabe está relacionada con el embarazo. Por varios meses presentó insuficiencia cardíaca que le generó cansancio extremo y falta de aire aún para las actividades cotidianas.
La gravedad de su enfermedad progresó razón por la cual consultó en un hospital privado el 27 de julio del 2007, en donde presentó a su ingreso arritmia grave que la llevó a paro cardíaco.
Su gravedad continuó y fue referida al hospital Calderón Guardia el primero de agosto de ese año. Las arritmias cardíacas se repitieron al punto que tuvieron que desfibrilarla en al menos 50 ocasiones, comentó el Doctor Carlos Araya, médico internista que atendió a la paciente.
El caso fue analizado por los cirujanos cardíacos, quienes decidieron colocarla en la lista para trasplante cardíaco ya que tenía un “mal pronóstico a corto plazo”. Estuvo en cuidados intensivos a la espera de un donante que apareció el jueves 30 de agosto del 2007. La cirugía comenzó a las siete de la noche y concluyó a la 1 de la tarde.
Ella recuerda su despertar al que calificó de muy emocionante: “estoy agradecida con los médicos y funcionarios del hospital, son ángeles que me dieron una oportunidad de ver a mis hijos crecer, verlos superarse, ver a mis hijas ir a la universidad”.
Carlos Araya, jefe de Medicina Interna y encargado del seguimiento médico, señaló que tiene una excelente condición física y que es una persona totalmente funcional e independiente.
Según explica el médico, la paciente tiene sus controles cada tres meses para recibir los medicamentos que evitan el rechazo del corazón y le mantienen otras situaciones de salud de fondo controladas.
María tiene 52 años y vive actualmente en Pacuare Viejo de Limón. Trabajó en JAPDEVA como técnica en informática, pero desde el 2008 se pensionó por invalidez.
María añadió que actualmente se dedica a disfrutar la vida y al hogar y que sus cuatro hijos y un nieto son su motor.
Desde que el hospital Calderón Guardia comenzó la actividad de trasplantes, 826 personas se han beneficiado con esta cirugía, de diversos tipos, que les ha permitido continuar y celebrar la vida junto a sus seres queridos.