Redacción- La noche de este martes inició una nueva temporada de la NBA, muchos aficionados con la ilusión de volver a ver a su equipo en acción, pero esta noche no fue felicidad para todos.
En el duelo entre los Celtics de Boston y los Cleveland Cavaliers, el joven de Indiana, Gordon Hayward sufrió una escalofriante lesión en su tobillo izquierdo, que lo a de las canchas por toda la temporada.
Cuando se disputaba el primer cuarto del choque que abrió la temporada de la mejor liga del mundo, la flamante incorporación protagonizó una escena que despertó preocupación y fragilidad en los espectadores.
La expectativa por ver a la estrella duró 5 minutos, porque el grado de la lesión modificó las sensaciones que se vivían en el estadio. A pesar de las lágrimas de los aficionados y los constantes mensajes de apoyo en las redes sociales, Hayward se vio obligado a dejar el compromiso en una camilla por la fractura expuesta del tobillo izquierdo que le generó su movimiento involuntario.
Compañeros, dirigentes y simpatizantes de los Celtics se unieron en un mensaje unificador para brindarle una pronta recuperación a su figura.