Redacción – De los 38 decesos reportados en carretera el pasado mes de setiembre, 21 de ellos tenían 30 años o menos. Esta cifra representa el 55% del total de fallecidos.
Según datos de la Dirección General de la Policía de Tránsito, de esos 21 casos, 16 eran personas entre los 21 y los 30 años, mientras que tres se encontraban en la franja de los 11 a los 20 años.
Finalmente, 2 tenían menos de 10 años de edad. El Director de la Policía de Tránsito, Mario Calderón, resaltó el caso de los dos niños con menos de 10 años, pues hasta el 31 de agosto pasado solo dos niños con menos de esa edad habían perdido la vida y en setiembre murieron otros dos.
En otras palabras, en un solo mes murieron tantos como en el resto del año.
Sin entrar a valorar los motivos de los fallecimientos, Calderón quiso aprovechar estas estadísticas para recordarle a los adultos la gran responsabilidad que tienen a la hora de transportar menores de edad, particularmente niños con menos de 12 años, quienes deben ir sujetos con un dispositivo especial, sea silla, cojín, o cojín con respaldar.
También recalcó que los niños con menos de cinco años de edad no deben viajar en motocicleta y los que sí lo pueden hacer deben llevar casco en la cabeza y chaleco o ropa reflectante.
Al 31 de agosto anterior, 698 conductores fueron sancionados con ¢207.359,54 de multa y sumaron 4 puntos en su licencia por llevar niños menores de 12 años sin los dispositivos de Ley, mientras que 79 motociclistas también recibieron la misma sanción por llevar niños por debajo de los 5 años de edad en ese tipo de vehículo.
Muertos por edad y causa
Respecto a las muertes por edad, 16 decesos en carretera durante setiembre (42% del total), eran personas entre los 21 y los 30 años.
Estos números son un reflejo de un patrón a lo largo del año, pues es el rango de edad en el que más mueren personas.
Entre enero y setiembre perdieron la vida 117 personas entre los 21 y los 30 años, lo que significa un 35% del total de fallecidos en accidentes.
Para el Comisario, la muerte de estas personas en plena juventud podría obedecer, en algunos casos, a malas decisiones, como conducir bajo los efectos del alcohol o abusar de la velocidad, que siempre es la principal causa de muerte en carretera.
“A esa edad todos fuimos imprudentes, la juventud, la vitalidad, la falta de madurez, nos hace sentir invencibles y eso es positivo para alcanzar objetivos personales, académicos y laborales, pero también, mal canalizado, genera imprudencias en carretera que cobra vidas, como el caso de motociclistas que no usan el casco para no despeinarse, por dar un ejemplo lamentable”, comentó Calderón.
El segundo rango de edad con más fallecidos es el de las personas entre los 31 y los 40 años, con 79 casos. Los siguientes grupos no pasan de 38 decesos.
Por otro lado, en lo que va del año, la principal causa de muerte en carretera, como siempre, es el abuso de velocidad, con 95 fatalidades, le siguen la invasión de carril con 76 muertes y la imprudencia del conductor con 67 casos.
Si bien la ebriedad del conductor se ubica como la quinta causa de muerte en carretera, con 18 fenecidos, es un tema que la Policía de Tránsito seguirá vigilando de cerca; más a las puertas de las fiestas de fin y principio de año.
Hasta el 31 de agosto anterior se habían hecho 18.335 pruebas de alcohol, con 1.438 conductores remitidos al Ministerio Público por conducir en estado etílico.
La cuarta causa es la imprudencia del peatón, con 49 fatalidades, otro tema al que se le prestará mucha atención para fin de año, comprendiendo que hay muchas actividades lúdicas que hacen confluir carros y personas en las calles, como las compras navideñas, el Festival de la Luz, la inauguración de árboles de navidad, conciertos, fiestas cívicas y patronales, entre otros.