Agencias – Apple admitió que su software iOS lanzado el año pasado puede reducir la velocidad de sus teléfonos para compensar algunos problemas con sus baterías de iones de litio envejecidas.
El gigante tecnológico explicó que a medida que envejecen las baterías, éstas pierden su capacidad de carga en relación a las baterías nuevas y pueden enfrentar problemas cuando tienen poca carga o en temperaturas bajas.
Cuando un teléfono abastecido por una batería antigua enfrenta una de estas condiciones, el mismo puede comenzar a operar con problemas o incluso apagarse inadvertidamente.
Tal fue el caso el año pasado con el iPhone 6 y el iPhone 6S, cuyos procesadores querían alcanzar velocidades más rápidas sin que las baterías puedan soportar la demanda, causando que algunos teléfonos se apaguen repentinamente.
En respuesta a este problema, comenzando con el iOS 10.2.1 Apple mejoró la capacidad de administración de energía de su nuevo software haciendo que los dispositivos sean efectivamente más lentos en casos de temperaturas frías, baja carga y baterías viejas para evitar que se apaguen, dijo la compañía.