Redacción – Muchos medicamentos (y alimentos) para humanos son tóxicos para nuestras mascotas, por lo que debe tener mucho cuidado con lo que deja a su alcance pues al ser tan curiosas puede ocurrir algún accidente si ingieren alguno de nuestros medicamentos aparentemente inofensivos.
Partiendo de la base de que no se debe darle, por supuesto, ningún medicamento a nuestra mascota sin consultar previamente con el veterinario, ni siquiera en aquellos casos en los que el animal lo ha tomado como tratamiento en una ocasión anterior.
Si no lo ha prescrito el veterinario, no le de nada a su mascota, pues puede ocasionarle graves problemas.
Una buena idea es no dejar a su alcance ninguno de nuestros medicamentos, cosméticos, cremas, etc, pues siempre es mejor prevenir que curar.
Acostúmbrese a tenerlo todo almacenado en algún armario o caja que esté en alto, fuera del alcance de su mascota.
Así se puede asegurar que no ocurrirá ningún accidente cuando lo deje sola en casa, pues la ingesta de determinadas sustancias puede ser letal para nuestras mascotas.
Pero, ¿cuáles son los más tóxicos para ellos, los que bajo ningún concepto podemos dejar a su altura? Para nuestra sorpresa, el ibuprofeno (que algunos veterinarios siguen recetando a los perros en pequeñas dosis) puede ser perjudicial para nuestros perros si se sobrepasa la dosis, e incluso en determinados casos aun respetando la dosis recomendada, así que es mejor evitarlo.
El paracetamol también es peligroso para las mascotas, en este caso más nocivo para los gatos, pero tampoco es bueno para los perros. Por otro lado, las aspirinas, aunque no tan tóxicas, también son más peligrosas para los gatos.
Los antidepresivos, los medicamentos para dormir o las pastillas anticonceptivas también son nocivas para las mascotas, por lo que en caso de accidente o de que sospechemos que nuestra mascota ha ingerido alguno de estos medicamentos se debe ir de inmediato al veterinario, por lo que pueda pasar.
Hay otros, como los medicamentos que disminuyen el colesterol, que no son letales para ellos pero pueden causarles un mal rato, con vómitos, malestar y diarrea, así que mejor ahorrárselo.
Algunas medidas que se pueden tomar son no guardar los medicamentos en una bolsa de cierre zip, ya que pueden abrirla, aunque creamos que no; almacenar todo en alto; y no guardar nuestras medicinas junto con las suyas, porque nosotros mismos podemos equivocarnos y darles el medicamento equivocado.