Redacción – Tras varios días de coordinaciones entre el Servicio Nacional de Guardacostas con autoridades de diversos países, este domingo un buque petrolero logró rescatar con vida a tres de los tripulantes del barco pesquero Capitán Bismarck, mientras que un cuarto pescador lamentablemente estaba fallecido.
Así lo informó el comisario Martín Arias Araya, director del Servicio Nacional de Guardacostas del Ministerio de Seguridad Pública.
Arias indicó que el rescate estuvo a cargo del barco petrolero Seaways Rubymar, con bandera de las Islas Marshall, el cual encontró al Capitán Bismarck a unas 70 millas náuticas al sureste de las Isla del Coco, lo que equivale a unas 245 millas náuticas al noreste de Punta Burica, en el Pacífico sur.
El Capitán Bismarck, con matrícula de Puntarenas P-9781, fue reportado con problemas el pasado 21 de febrero, luego de que el Guardacostas recibiera una alerta, según la cual dicha embarcación se encontraba entre con problemas en una posición cercana a Colombia y Ecuador.
De acuerdo con esa alerta, el barco puntarenense tenía problemas en sus equipos luego de que un rayo lo impactara, por lo que de inmediato el Guardacostas inició un intenso proceso de coordinación con autoridades de Estados Unidos, Colombia y Panamá.
Fue así como este domingo, luego de que los tripulantes del Capitán Bismarck realizaran una llamada mediante un teléfono satelital, el Guardacostas coordinó con la Guardia Costera estadounidense y una empresa de telefonía satelital para realizar una triangulación y dar con el barco costarricense.
Según lo explicado por el comisario Arias, es la primera vez en la historia del Guardacostas que se tiene que efectuar una triangulación de este tipo durante una operación de rescate.
Las autoridades estadounidenses de inmediato remitieron una alerta a fin de lograr contactar al barco que se encontrara más próximo al Capitán Bismarck, lo cual permitió contactar al petrolero Seaways Rubymar, cuyos tripulantes indicaron que ellos podían ayudar en el rescate.
Petrolero se desvió 90 kilómetros del rumbo inicial para ayudar a costarricenses.
Luego de tener que desviarse unos 90 kilómetros de su rumbo, fue así como cerca de las 12 de la noche del domingo que finalmente el Seaways Rubymar logró comunicarse con el Servicio Nacional de Guardacostas de nuestro país para indicar que habían contactado al Capitán Bismarck, cuyo motor estaba completamente averiado, por lo cual no podía regresar por sí mismo al puerto de origen.
Por tal razón, el pesquero fue dejado a la deriva con unas luces estroboscópicas para advertir a las demás naves acerca de su posición y evitar así un accidente.
El personal del citado petrolero indicó además que trasladarían a los náufragos costarricenses, incluyendo el cuerpo de uno de ellos que lamentablemente había fallecido la tarde del domingo, hasta el lugar donde harían la próxima escala, el cual es Puerto Esmeraldas en el norte de Ecuador, sitio al cual estarán llegando poco después de la medianoche de este lunes.
Los pescadores del Capitán Bismark que fueron rescatados con vida son Víctor Umaña Villegas, de 30 años de edad, Jorge Fernando Chavarría Mendoza, de 63 años, y Audiel Rivas Bejarano, de 39 años, en tanto que el pescador fallecido fue identificado como Florencio Vásquez.
Según las versiones de sus compañeros, Vásquez, de 67 años de edad, era diabético y al parecer falleció tras sufrir un infarto.
De acuerdo con lo informado por el comisario Arias, el servicio Nacional de Guardacostas informó sobre este rescate a la Cancillería de nuestro país para que el cónsul costarricense en Ecuador efectúe las diligencias necesarias a fin de repatriar a los tripulantes del Capitán Bismarck.
Barco navegaba sin dispositivo que hubiera permitido su ubicación y fuera de lo que le permitía su capacidad de navegación.
Arias hizo ver que el citado pesquero posee una autonomía de navegación muy limitada como para desplazarse hasta posiciones como en la que fue encontrado, por lo cual el Guardacostas constantemente le está recordando a las embarcaciones nacionales tener presente ese factor y no desplazarse más allá de lo que legal y técnicamente les está permitido.
En este caso, el Capitán Bismarck sólo podía navegar hasta unos 75 kilómetros de la línea costera, pero se encontraba a más de 300 kilómetros de la costa.
Además de ello, Arias hizo ver la urgencia de que las embarcaciones porten una radiobaliza, el cual es un dispositivo transmisor de radio que permite a las autoridades conocer con exactitud la localización de un barco en alta mar.