Redacción – Ziad Akl, el hermano del hombre asesinado en Escazú el 15 de marzo de 2017 tras recibir disparos y que fue detenido por el Servicio de Vigilancia Aérea de Seguridad Pública ese mismo día, fue puesto en libertad por decisión del Juzgado Penal de Pavas a cambio de otras medidas cautelares (ir a firmar cada 15 días).
Ante un proceso penal pendiente en el país, la deportación a cargo de la Dirección de Migración y Extranjeria, debe ser analizada mediante el debido procedimiento, ya que el sospechoso está con estatus migratorio irregular en el país, más el hecho de ser considerado un perfil altamente peligroso.
Luego de su puesta en libertad y la condición migratoria irregular del hombre y tras orden del Ministro Mata, Migración y Extranjería procederá con la aprehensión de acuerdo con la Ley de Migración, y en 24 horas procederá a conocer y analizar la situación del extranjero para determinar la viabilidad de un posible proceso de deportación, considerando y entrando a conocer los hechos indicados por la jueza penal respecto a asuntos pendientes con la Justicia costarricense.
Por ello, el Ministro de Seguridad Pública, Gustavo Mata Vega, solicita respetuosamente a las autoridades judiciales cambiar las medidas impuestas y facultar al Gobierno para proceder con la deportación de ese sujeto de origen libanés por su condición migratoria y a quien la inteligencia policial califica como altamente peligroso al presuntamente vinculársele con delitos como extorsión, participación en homicidios y otros hechos graves y violentos.
Akl tenía impuestos 6 meses de prisión preventiva y el quedar sin esa medida (libre), no se descarta que podría reincidir y continuar cometiendo más actos violentos.
Por ello, el ministro Mata considera que el hecho de que sea deportado de forma inmediata y que no esté en el país es una medida paliativa ante el aumento de la violencia en el país y a sabiendas de la forma en que operaba la estructura de estos hermanos.
El Ministro considera que someterlo a un proceso en el país, al ser considerada una persona altamente peligrosa, sería como darle una licencia o estatus de ciudadano costarricense para seguir en sus actividades irregulares.
Cabe destacar que ambos hermanos eran buscados por el asalto y paliza que dieron a un hombre cerca de un bar en junio de 2009 y a nivel internacional son reconocidos por sus hechos graves.
Asimismo, Mata Vega externó que respeta el criterio jurisdiccional pero no lo comparte por lo expuesto anteriormente.
El jerarca augura contar con el apoyo de la Fiscalía General de la República ante el criterio que ha manifestado y que se propicie un cambio de medidas para poder hacer efectiva su deportación.