El 20 de marzo se celebra el Día Internacional de la Felicidad, una iniciativa de las Naciones Unidas que surgió desde el 2013 y que reconoce el importante papel que desempeña este estado de ánimo en la vida de las personas de todo el mundo.

Múltiples estudios han tratado de definir la felicidad, el tesoro más codiciado de nuestros tiempos, un concepto abstracto y subjetivo. Pero, más allá de obtener una definición, las investigaciones se centran en establecer las claves para ser feliz.

El doctor Tal Ben-Shahar, profesor de la Universidad de Harvard y experto en psicología positiva, sostiene que las personas pueden aprender a ser felices. Con base en numerosos estudios, el experto ofrece seis consejos para conseguir ser felices:

  1. Perdone sus fracasos. Es más: ¡celébrelos!
  2. No dé lo bueno por hecho: agradézcalo.
  3. Haga deporte.
  4. Simplifique, en el ocio y en el trabajo. Concentrarnos en lo verdaderamente importante.
  5. Aprenda a meditar.
  6. Practique una nueva habilidad: la resiliencia.Es la capacidad para enfrentarse a una situación adversa o un momento difícil de su vida, y recuperarse de una manera fortalecida y con muchos más recursos.

Además de todo lo dicho anteriormente, tener una buena salud es clave para ser feliz, y esto depende en gran medida de nuestra alimentación. La nutrición y el bienestar están íntimamente relacionados.

Como parte de esta celebración Las Naciones Unidas invita a las organizaciones internacionales y regionales y a la sociedad civil, incluidas las organizaciones no gubernamentales y los particulares, a realizar actividades educativas y de concienciación.

En esta línea, Patricia Vial, Gerente de Nutrición, Salud y Bienestar de Nestlé Centroamérica, ofrece una serie de consejos relacionados con la alimentación variada y balanceada y el deporte, los dos ingredientes básicos para un estilo de vida saludable.

Cada persona tiene necesidades específicas de nutrientes, las cuales varían según la edad, el sexo, el peso, la talla y la actividad física. Por eso es importante seguir cuatro reglas fundamentales del buen comer:

Salud

  1. Realice cinco tiempos de comida. Incluya en su rutina de alimentación tres comidas principales (desayuno, almuerzo y cena) y dos meriendas, que pueden hacerse, preferiblemente, a media mañana y a media tarde. Los expertos recomiendan la ingesta de alimentos cada tres horas, en promedio, para lograr que el organismo cumpla con las exigencias diarias.
  2. Elija la variedad. Ningún alimento contiene todos los nutrientes que necesitamos, por lo que debemos escoger diferentes tipos de alimentos, de diferentes grupos, para satisfacer los requerimientos de nuestro cuerpo: carbohidratos -cereales, granos y raíces-, frutas y vegetales, lácteos, proteínas -carnes, aves, mariscos y huevos-, grasas y azúcares.
  3. Encuentre el equilibrio. Es fundamental tener un balance en los alimentos que consumimos. Se deben incluir alimentos de todos los grupos en las comidas principales.
  4. Modere las cantidades. Debemos mantener un balance en las cantidades de alimentos que ingerimos y esto depende, en gran medida, de nuestro género, edad y talla y del nivel de actividad física que realizamos. Las porciones no deben ser ni muy pequeñas, ni muy grandes.

Deporte

  1. Defina su meta. Antes de determinar el tipo y la duración de la actividad física diaria, le recomendamos definir cuál es su meta o qué quiere lograr con el ejercicio físico: mantener una buena salud, bajar de peso, fortalecer sus músculos, etc.
  2. Realice ejercicio aeróbico y para el fortalecimiento muscular. El ejercicio aeróbico consiste en el uso repetitivo de los músculos grandes para aumentar, temporalmente, la frecuencia cardíaca y la respiración. Por ejemplo, correr, caminar, nadar y montar en bicicleta, entre otras.
  3. Cantidad y calidad de los ejercicios. Las Guías del American College of Sports Medicine de 2011 (ACSM) recomiendan que los adultos, aparentemente sanos, deben realizar 150 minutos de actividad aeróbica de intensidad moderada, al menos 5 veces por semana, más 75 minutos de actividad aeróbica intensa, tres veces por semana.