Redacción- La Cámara Costarricense – Norteamericana de Comercio (AmCham) no quedó convencida del proyecto de estabilización de las finanzas públicas, que propuso el Poder Ejecutivo a la Asamblea Legislativa.
Los norteamericanos lamentan que en este esfuerzo no haya sido aprovechado para proponer una reforma más profunda en materia de gasto público y así controlar más eficientemente el problema relacionado con el déficit primario que afronta el país.
AmCham reclama, a los sectores políticos involucrados en la elaboración de este plan, más congruencia al proponer acciones.
El Proyecto actual es un parche más, que no elimina los yerros desde la raíz y más bien los posterga creando mayores impuestos a la población, sin abordar el deficiente, desordenado y excesivo gasto público, que ha sido señalado como uno de los más serios problemas de la situación financiera que nos aqueja.
La Cámara exige que haya más intervención en el rubro de control de gasto público y, dentro de esa categoría, entrarle con seriedad al régimen de empleo público, proponiendo verdaderas soluciones.
Algunas de ellas, por ejemplo, son: impulsar el congelamiento de nuevas plazas en la Administración Central y Descentralizada, poner topes al salario público y a las transferencias, autorizando solamente un crecimiento asociado a la inflación y erradicando todos esos incentivos excesivos y aumentos relacionados con el ingreso fiscal, que incrementan desproporcionadamente el gasto público.
“Los empresarios estamos conscientes del problema fiscal que existe y hemos sido propositivos en aspectos que sí ayudarían a corregir la situación en la que estamos. El país no puede sostener más impuestos. La carga impositiva combinada de Costa Rica ya es muy alta y afecta directamente nuestra competitividad para generar empresa y crear más fuentes de empleo. Si no se tiene la valentía de revisar los disparadores del gasto público, inevitablemente se afectará el clima de inversión y se profundizará la crisis económica”, comentó Elías Soley, presidente de AmCham.