Redacción – Un nuevo estudio de la Universidad de Costa Rica (UCR) documentó 13 casos de muerte por procedimientos estéticos en el Departamento de Medicina Legal del Poder Judicial entre enero de 2006 a diciembre de 2015.
Como resultado, se halló que la cirugía realizada con mayor frecuencia y que generó mayores fallecimientos por embolismo pulmonar fue la liposucción.
A ese procedimiento le siguen las cirugías para el agrandamiento de glúteos y, en tercera posición, la remodelación de abdomen.
Pero el embolismo pulmonar -complicación que impide el paso de la sangre en las arterias de los pulmones- no fue el único motivo directo de muerte. En segundo lugar se ubicó el shock séptico -infección masiva en el cuerpo humano- y luego el shock hipovolémico, también conocido como síndrome hemorrágico o sangrado intenso.
La investigación, primera en el país y presentada a mediados del 2017, fue realizada por la Dra. Marcela Balmaceda Chaves, bajo la supervisión del Dr. Maikel Vargas Sanabria, en el marco del Programa de Posgrado en Especialidades Médico Forenses con énfasis en Medicina Legal de la UCR.
La Dra. Balmaceda explicó que hubo pacientes que experimentaron hasta cuatro procedimientos estéticos en un mismo tiempo quirúrgico, lo cual genera una importante preocupación a nivel médico.
“El embolismo pulmonar se divide en otras categorías. Una es el embolismo graso -obstrucción de un vaso arterial por una masa de grasa-, que fue el más usual y que estuvo relacionado con la liposucción. El deceso se produjo durante o justo cuando terminó la operación. El resto de las causas (shock séptico y el hipovolémico) fueron complicaciones que surgieron después de la cirugía. Hay una serie de factores que pueden incidir como la condición inicial del paciente, un mal manejo quirúrgico o pocos cuidados postoperatorios”, indicó la Dra. Balmaceda.
La especialista recordó que las cirugías estéticas no están exentas de complicaciones y el hecho que el paciente sea sano y joven no lo exime de las mismas.