- Lazos negros adornan la universidad en honor a su colabodor
Redacción – El Instituto Tecnológico de Costa Rica (TEC) recuerda con flores, velas y fotografías, al colaborador de su restaurante institucional, Pablo Espinoza, quien murió por sumersión el pasado sábado 26 de mayo en el río Savegre en Quepos, mientras nadaban con su primo -quien falleció también- en una poza del lugar.
Ambos jóvenes eran oriundos de Caballo Blanco en la provincia de Cartago y desaparecieron el mismo día en el sector de Portalón de Savegre.
Un altar acompañado de rosas, girasoles y candelas es lo que conmemora lo que representó para los estudiantes y personal de la institución en el tiempo que trabajó como cocinero del comedor del TEC.
«Tienes que mirar… tienes que ver todo en su momento; porque al cabo y con el paso del tiempo nada va a ser igual. Va a dejar de existir», escribieron estudiantes en el altar.
Bajo la frase «FEITEC somos todos», la federación de estudiantes publicó en su página oficial de Facebook un mensaje para su familia, en memoria de Espinoza.
«El Consejo Ejecutivo de FEITEC hace extensivas sus condolencias a la familia y amigos del funcionario Pablo Espinoza, quien fue un gran colaborador del Restaurante Institucional. Para todos los que tuvimos la oportunidad de conocer a Pablo, siempre lo recordaremos como una persona servicial y muy allegada a la comunidad estudiantil. Paz a sus restos y mucha fortaleza para su familia y amigos».
Con pilots, los estudiantes diseñaron un cartel para firmar con mensajes dirigidos a Espinoza tras su fallecimiento.
«Hasta siempre Pablito. Tu luz brillará por siempre», fue parte de los mensajes dedicados al homenajeado.
Además, el personal también se encargó de colocar lazos negros por diferentes partes del centro universitario.
Para la recuperación de los cuerpos, la Cruz Roja destinó la operación con equipo especializado para el domingo siguiente del suceso por las condiciones del tiempo, para lo que destinó 10 rescatistas, entre ellos tres buzos.
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Según versiones de los testigos, uno de los jóvenes se estaba ahogando y su primo intentó salvarlo, pero ambos fueron arrastrados por la fuerte corriente.
Las víctimas del accidente acuático fueron identificadas como Pablo Espinoza Brenes de 29 años y David Brenes Jiménez de 28.
