Redacción – La posibilidad de ponerle un impuesto a la cerveza cada vez es más viable entre los diferentes diputados que integran la Comisión de la reforma fiscal.
El diputado del Partido Frente Amplio y ex candidato presidencial, José María Villalta, presentó una moción para colocarle un impuesto de doce colones a cada bebida alcohólica importada o producida en el país.
Para el legislador, esta es una medida que permitiría incrementar la recaudación tributaria sin afectar a los sectores más vulnerables de la población.
«Hemos estado buscando, en la discusión del plan fiscal, alternativas a algunos tributos que el gobierno ha planteado, como los que afectan la canasta básica o las medicinas. Y una alternativa que existe es incrementar un poco los impuestos que ya existen a las bebidas alcohólicas», sentenció Villalta.
En la propuesta, las bebidas que tendrían impuestos serían la cerveza y «coolers» de 350 mililitros; los vinos, espumantes y sidras de 125 ml; cremas, vermouth, jerez, oporto, ponche y rompope de 75 ml; así como el resto de las bebidas alcohólicas que contienen 31,25 ml.
Además, si las bebidas vienen en envases de otro volumen, se le aplicará el tributo de forma proporcional.
Uno de los que está a favor es el diputado de Restauración Nacional, Eduardo Cruickshank. El limonense afirmó que la cerveza debería gravarse porque «no son cosas básicas para la supervivencia del ser humano».
También la apoyaría el diputado de Integración Nacional, Wálter Muñoz, siempre y cuando se destine hacia la atención de enfermedades producidas por el abuso del licor.
Por su parte, la liberacionsita Yorleni León, indicó de entrada que sí estaría de acuerdo, sin embargo, tendría que analizar la repercusión en términos de los costos y la competitividad.
En el 2002, ya se había aprobado otro proyecto que gravaba el consumo de la cerveza.
Inclusive, según el reporte de evaluación de los ingresos correspondientes a la Ley de Contingencia Fiscal, el gobierno había recaudado por concepto del impuesto a las bebidas alcohólicas un monto de 3637 millones de colones.
Con el nuevo tributo, el legislador estimaría una recaudación anual de 10 mil millones, aunque considera que podría ser más si se gravan otros bienes y servicios no esenciales.