Centro para la Investigación de Ballenas

Redacción – Los días de luto para esta mamá ballena han terminado luego de que, durante 17 días, arrastrara a su cría muerta por el océano para evitar que se hundiera.

Fueron aproximadamente 1.600 kilómetros de recorrido de esta madre orca. Aparentemente, este viaje lo inició desde el 27 de julio y para este 13 de agosto, ya no llevaba el cadáver.

La hembra murió después de unas horas. La madre, evitando que su bebé se hundiera, la empujaba hacia la superficie del Pacífico frente a la costa de Canadá y el noroeste de Estados Unidos.

El Centro de Investigación de Ballenas, que rastrea e investiga a la población de cetáceos del sur del Océano Pacífico oriental, registró por primera vez a la cría el 24 de julio. La ballena hembra murió pocas horas después de su nacimiento y, según los investigadores que analizaron este particular caso, cuando el cuerpo se hundió en el agua, la madre lo empujó repetidamente hacia arriba, manteniéndolo a flote durante al menos tres días mientras ella y el resto de su manada nadaban.

Centro para la Investigación de Ballenas

A esta ballena madre la llaman Tahlequadh y tiene 20 años. Ella pertenece a una comunidad de 75 orcas agrupadas en tres manadas que conviven entre el extremo sur de la isla de Vancouver, en Canadá, y las aguas del estado de Washington en Estados Unidos.

«Ya no llevaba el bebé fallecido que había llevado a menos diecisiete días y 1,000 millas. Su recorrido de dolor terminó y su comportamiento es notablemente juguetón. Las imágenes digitales de teleobjetivo tomadas desde la costa muestran que esta madre ballena parece estar en buenas condiciones físicas después de esta prueba de récord. Hubo reportes durante los avistamientos de ballenas hace dos días donde Tahlequah ya no estaba empujando el cuerpo en el Estrecho de Georgia cerca de Vancouver y ahora podemos confirmar que ella definitivamente lo ha abandonado», publicó el Centro de Investigación de Ballenas en su sitio web.

De acuerdo con los investigadores, la falta de salmón Chinook –fuente principal de alimento de esta especie- es la razón fundamental de que las crías se enfermen y no sobrevivan.

Esta situación mantiene alerta a los biólogos y científicos. La cantidad de orcas en el noroeste del Pacífico están disminuyendo, pues las estadísticas de las muertes de crías son preocupantes y su tasa de natalidad en los últimos años ha sido cero.

«El cadáver probablemente se haya hundido en el fondo de estas aguas marinas continentales del Mar de Salish y es posible que los investigadores no tengan la oportunidad de examinarlo para su autopsia», destacó el centro.

Algunas ballenas han tenido que recibir antibióticos por pérdida notable de peso y por falta de nutrientes necesarios para sobrevivir en su hábitat. Las ballenas asesinas están en peligro de extinción y por eso son especies tan custodiadas por las autoridades en este tema.

«Tahlequah unió a millones de personas en todo el mundo en desamor y amor mientras cargaba su cría muerta durante unos 1.600 kilómetros», afirmó el gerente de Organización de Campo de Greenpeace Estados Unidos, Ben Smith.