Redacción-No cabe duda de que «Bird Box» se ha convertido en todo un suceso en Internet. Tras ser estrenada en Netflix el pasado 21 de diciembre, la cinta rompió un récord al ser la película de dicha plataforma de streaming más vista en una semana.
La historia gira en torno a una madre, Malorie, interpretada por Sandra Bullock, y sus dos «hijos» que navegan por un río con los ojos vendados para llegar a un refugio, luego de una epidemia de suicidios en el mundo.
Si bien la trama contada en la cinta logra atrapar en todo momento al público, no muchos saben que ésta se basa en un libro del mismo nombre, escrito por Josh Malerman. Y como en toda adaptación, es normal que existan varias diferencias entre la historia original y el guión de la película.
Una de las que más ha llamado la atención ha sido la escena final. En ella, Malorie llega junto a sus hijos a un santuario, el cual es una escuela para niños ciegos, donde varias personas no videntes crearon un refugio donde conviven junto a personas que sí ven en un amigable ambiente libre de monstruos.
Sin embargo, en el desenlace del libro se cuenta una historia mucho más oscura y macabra. Malorie llega a este santuario junto a sus hijos, pero en vez de ser un esperanzador y feliz ambiente, llegan a una comunidad donde viven personas que decidieron sacarse los ojos para sobrevivir a esta especie de apocalipsis.
En una entrevista realizada por el sitio Polygon a Susanne Bier, directora de la película, señaló que decidió modificar el final con la intención de que la audiencia pudiera tener un «cierre esperanzador» al ver que los protagonistas encuentran un lugar donde finalmente vivir.
«La película es un poco más positiva. Es, en muchos aspectos diferente del libro, pero también está muy arraigada en él. El libro también tiene una especie de final positivo y no hubiera querido hacer una película apocalíptica que no tuviera un final esperanzador», dijo Bier.#.t13.cl