- Vergara guió al Monstruo a la gloria
Redacción – El empresario azteca, Jorge Vergara, es muy recordado por ser el encargado de levantar al Monstruo y llevarlo a la cúspide, pero actualmente vive una situación muy complicado con su estado de salud.
El dueño de Chivas y exdueño del Saprissa, vive un momento difícil, ya que Mauricio Ymay, analista de ESPN, aseguró en el programa de Futbol Picante que la salud de Vergara es complicada.
Desde la semana pasada su situación se agravó e incluso el analista reveló que familiares viajaron a Nueva York, para estar a su lado y acompañarlo en estos momento más complicados.
Desde hace un año, Jorge Vergara delegó algunas decisiones a su hijo, Amaury, y a José Luis Higuera, a quien nombró CEO del equipo, para tomarse un «descanso» y alejarse de la luz pública.
Sin embargo; se sabe que la salud del propietario ha estado comprometida. El propietario de Chivas no ha tenido contacto con la prensa y solo ha hecho diversas manifestaciones a través de redes sociales.
En marzo, David Faitelson reveló que intercambió mensajes directos en Twitter con el dueño del Guadalajara, quien prefirió no opinar del momento actual del equipo rojiblanco porque no se encuentra a cargo de las decisiones.
«Me dijo que en este momento lo tengo que disculpar pero que él no está a cargo de las Chivas, que levante el teléfono y les marquemos a las personas que están a cargo del equipo», señaló .
El 15 de marzo del 2018, Vergara apareció por última vez en público y algunos reportes han señalado que el empresario se habría tomado un «año sabático» y en diciembre pasado.
José Luis Higuera descartó en ESPN Radio Fórmula que Jorge estuviera enfermo. Sin embargo, se desconocía si el propietario volverá a la institución en un futuro cercano
Vergara es recordado por resucitar al Monstruo de las cenizas, debido que en su llegada al Saprissa el club tibaseño corría peligro de desaparecer, pero con un arduo trabajo levantó a los morados.
Además, fue el jerarca que encaminó el proyecto de los tibaseños, que llegaron al tercer lugar en el Mundial de Clubes de Japón 2005, una proeza única en el fútbol de la región.
