- Joven afirma que una profesora lo insultó y le insistió su asistencia a la huelga
- Otro dos supuestos casos de amenazas se presentaron en Guanacaste y Puntarenas
Redacción – Un estudiante del Liceo La Guácima de Alajuela dedicó toda una publicación en su Facebook para relatar unas supuestas amenazas que recibió al negarse a asistir a la huelga de estudiantes.
Luis Fonseca, identificado como Luis Fonsagui en su perfil, afirma que fue una de sus profesoras que le insistió su asistencia a la manifestación, e incluso -aparentemente- lo insultó por no querer lanzarse a las calles.
Además, explicó que, al llegar al colegio, lo primero que escuchó fue a uno de los oficiales de seguridad que le preguntó si iba a asistir a la huelga.
«Esa manifestación no le pertenece a los estudiantes definitivamente», expresó por su experiencia vivida ese día.
Incluso, el estudiante afirmó que ese día era la feria científica del centro educativo, pero la cancelaron para las manifestaciones; sin embargo, el no quiso asistir porque no conocía las razones ni le encontraba lógica que se pronunciaran contra el IVA.
«Cuando llegué al colegio el primer día de la manifestación lo primero que me recibió fue el guarda preguntándome si me iba a manifestar, y cuando le dije que no y que me parecía una tontería (no con esas palabras) me enjachó y me dijo que era mi responsabilidad (más o menos), y cuando le pregunté que por qué se iban a manifestar, me dijo que por el IVA (lo que me pareció muy ilógico tomando en cuenta que ya está aprobado) y él me dijo que hablara con muchacho del colegio que era el que estaba organizando la manifestación, cosa que no hice porque, en realidad, no tenía un propósito para buscarlo. Era el día de la feria científica y yo entré a presentar mí proyecto, y cuando subí me cayó encima una profesora a decirme que me manifestara, yo le dije que ni siquiera sabía porque era, y lo que me dijo fue que no tenía que saber. Ese día la manifestación empezó al medio día y yo decidí no salir, sino quedarme en el colegio, y después cancelaron la feria científica, ya luego me fui», relató.
A la mitad de su post en Facebook, este joven explica que al día siguiente continuaron las amenazas, aparentemente. Él llegó al colegio, pero no quiso salir, pues entró antes de que cerraran la institución con candado.
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Ahí fue cuando, supuestamente, una educadora les dijo idiotas a él y a su hermana, Daniela Fonseca. Además de sus mismos compañeros que, según él afirma, lo amenazaron con «consecuencias» si no asistían a la huelga.
Por lo anterior, Fonseca cuestiona que no hubo consecuencias para los jóvenes que rompieron las reglas a favor de las manifestaciones, pero para ellos sí.
«Él día siguiente fue peor, porque a mí me gusta pelear, entonces madrugué y llegué al cole antes de que le pusieran cadenas, y me quedé adentro junto con mí hermana (la pobrecita me siguió) y fue todo un lío porque todo el mundo quería obligarnos a salir, nos amenazaban con consecuencias (eventualmente las consecuencias fueron amenazas solo para quienes entraron después de cerrado el colegio) y una profesora hasta nos trató de idiotas, esa manifestación no le pertenece a los estudiantes definitivamente. Curiosamente no habían consecuencias para las personas que estaban rompiendo reglas en pro de la manifestación, y es claro por qué, quienes hacen cumplir las reglas (esencialmente) los apoyaban. Lo comparto como acta y relato», concluyó.
Entonces, ¿los estudiantes son amenazados por no querer asistir a huelga?
Las semanas anteriores, se presentaron dos casos, uno en Puntarenas y otro en Guanacaste. El primero fue que una madre de familia recibió, aparentemente, una serie de mensajes de un docente que le insistía para que su hijo fuera a la huelga.
En Guanacaste, la hermana de un estudiante denunció en redes sociales que él recibió un supuesto audio a su WhatsApp sobre que lo iban a golpear si no se unía al movimiento. De igual forma, todos estos casos se manejan como supuestos hasta que se comprueben o descarten.
En el Ministerio de Educación Pública (MEP) existe un departamento llamado Contraloría de Derechos Estudiantiles, donde los alumnos pueden denunciar este tipo de conductas.
