Por primera vez en CR, condenan a una persona por maltrato animal: violó a perrita dos veces

• Hombre no recibió beneficio de ejecución de la pena
• Deberá pasar seis meses en prisión preventiva

Tribunal Penal de Pavas- Por primera vez en Costa Rica, un tribunal condena a una persona por maltrato animal. Esta vez se trata de Fausto Rojas, de 55 años, quien violó a una perrita en Alajuelita.

A Rojas se le condenó a seis meses de prisión por cada delito, por lo que pasará un año en la prisión, pues se le comprobaron dos violaciones.

Rojas no cumplió con los requisitos para recibir el beneficio de ejecución de la pena, es decir, para descontar la condena en su casa.

De acuerdo con la jueza, el hombre a pesar de tener un domicilio fijo, vivía en la indigencia y era un habitual consumidor de drogas, lo que pesó para que se le negara el beneficio.

Los hechos ocurrieron en octubre de 2017 y varios vecinos fueron testigos del atroz hecho, cuando este hombre insertó su pene en el ano de la perrita de nombre Ala.

La abogada y presidenta de la Asociación para el Bienestar y Amparo Animal (ABAA), Maricruz Uba Loaiza, es quien representa a Ala en este juicio.

Detenido

Rojas Araya es una persona en condición de indigencia y, al no presentar antecedentes, fue puesto en libertad luego de su primera detención.

La primera vez fue detenido luego de que una vecina llamara a la policía y otros dos se acercaran a la delegación a interponer una denuncia.

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Empero, las autoridades volvieron a detenerlo el 24 de diciembre anterior, debido a que no se presentó a una citación de audiencia preliminar y no pudieron localizarlo hasta el momento de su segunda arresto, por lo que le ordenaron dos meses de prisión preventiva al declararlo «rebelde».

Juicio

De acuerdo con los testigos oculares en el caso, quienes declararon el viernes 21 de febrero, este hombre acostumbraba llevar perros y gatos bebés en sus brazos y normalmente estaba rodeado de animales.

Además, lo veían deambular por su comunidad mientras consumía drogas -marihuana y crack- y alcohol.

Los testigos coincidieron en que observaron a Rojas penetrando analmente a Ala en plena vía pública y a la luz del día.

Incluso destacaron que la animal tenía sangre en su ano y gritaba del dolor por la violación. Eso los hizo expresar su temor por la seguridad de su barrio en San Felipe de Alajuelita.

Uno de los testigos, Pablo Campos, destacó frente a la sala de juicio que él escuchó al acusado, en la delegación policial, cuando pidió que no apartaran a la perra de él porque «es su novia».

Ahora Rojas deberá cumplir prisión preventiva seis meses más, para posteriormente cumplir la condena fijada por la jueza Sonia Quintana de Tribunal Penal de Pavas.