Redaccion- Tras un mes de haber iniciado la campaña de solidaridad Barco de Alimentos para familias pesqueras, la Cámara Nacional de la Industria Palangrera logró reunir donativos que han llegado a la fecha a más de 1000 familias de pescadores de palangre en Puntarenas, Quepos y Golfito.
La campaña, que arrancó el 13 de abril pasado, se propuso como meta crear un canal directo de atención a las familias de los tripulantes que en este momento habían sido afectadas de manera directa por la paralización de la actividad y la caída de precios que provocó como efecto inmediato la crisis sanitaria del COVID-19.
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“Frente a la falta de soluciones por parte del Gobierno, tuvimos que organizar nuestra propia colecta de alimentos para atender las necesidades de las familias de nuestros sector.
Hoy, un mes después, estamos absolutamente satisfechos y agradecidos con las decenas de personas, empresas y organizaciones que abordaron el barco para donar alimentos y permitirnos atender los casos más urgentes, de más de 1000 familias”, aseguró Mauricio González, Director Ejecutivo del Sector Pesquero Nacional.
Uno de los aspectos que más llamó la atención en esta campaña del Barco de alimentos fue la solidaridad que mostraron personas individuales y grupos de familias y amigos que se organizaron para reunir alimentos y hacerlos llegar a Puntarenas para su respectiva distribución.
Según estimaciones de la Cámara Nacional de la Industria Palangrera los donativos recibidos a la fecha superan los 26 millones de colones. Esto incluye productos de la canasta básica, de higiene personal, frutas y verduras, tan necesarios en este momento.
“Las donaciones recibidas nos permitieron incluso apoyar a otros subsectores pesqueros que no estaban incluidos inicialmente en la campaña del Barco de Alimentos. Fue así como pudimos a apoyar a algunas familias de pesca artesanal, de camarón, peladoras de camarón y molusqueras”, agregó González.
El Sector Pesquero Palangrero Nacional está integrado por hombres y mujeres que son, en
muchos casos, el único sustento de sus familias. La pandemia del COVID-19 en el país y a nivel mundial, ha afectado dramáticamente a este sector, en sí vulnerable, que vio inicialmente suspendida su actividad económica, que depende, en un alto porcentaje de la exportación de sus productos y del mercado nacional tanto de restaurantes como de sitios de interés turístico.
La situación se agravó a tal punto que la actividad de pesca estuvo paralizada por completo.
“Nuestro sector ya venía afectado por una larga crisis económica y el COVID-19 fue una situación inesperada que vino a agravar más la situación. No obstante, de las crisis también
aprendemos y estamos seguros de que saldremos fortalecidos porque a través de esta iniciativa hemos mostrado nuestra capacidad de organización y la solidaridad del pueblo de Costa Rica con nuestro sector”, agregó Mauricio González.
Tras superada la fase inicial de la crisis por COVID-19 donde los precios de productos pesqueros como atún, dorado y pez espada, corvina, cabrilla, entre otros, bajaron en más del 50% en muelle y el 80% de la flota pesquera enfrentó dificultades para mantener su operación, el sector pesquero se apresta para retomar su actividad.
“Con gran esfuerzo, los propietarios de las embarcaciones de palangre han logrado reunir fondos para alistar sus barcos y volver al mar nuevamente. Estamos ahora analizando canales alternos de comercialización con la esperanza de reactivar nuestra actividad y encontrar soluciones creativas a los problemas que vienen tras esta crisis , explicó Mauricio González.
La campaña Barco de Alimentos recibió colaboraciones de donantes individuales de todas partes del país, así como de institucionales y empresas, entre los que mencionamos a Walmart, Distribuidora El Armenio, Café Rey, Almacenes Roesy Cámara Nacional de Exportadores (CADEXCO).
También la Cámara Nacional de Exportadores de Productos Pesqueros y Acuícolas (CANNEP), Inversiones Brancol, SaniPro, Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura (INCOPESCA), la Federación Costarricense de Pesca (FECOP), la Asociación Independiente de Productores del Norte de Cartago, Muelle JOSE, el Parque Marino del Pacífico, Smart Zone, Fundación SIFAIS Suzuki, Corbana, Fructa Cr, Del Monte Siempre Contigo Crowley Limón, BEL Electric y la Municipalidad de Esparza, Hacienda El Viejo y Coopeliberia, entre otros donantes.
“Agradecemos profundamente la entrega y solidaridad del pueblo de Costa Rica con nosotros los pescadores de palangre, nuestro agradecimiento eterno y nuestro compromiso es ponernos de pie y seguir trabajando por Costa Rica. Hoy hacer patria es ponernos a trabajar en medio de las dificultades y esto no hubiera sido posible sin la mano que nos han dado nuestros hermanos”, concluyó González.
