- Mamá de Santiago pedía mucha oración por él
- Su burbuja social le hizo una fiesta de bienvenida cuando lo dieron de alta
Redacción – La historia de Santiago y su familia es digna de escuchar, conmoverse y ver una luz de esperanza en medio de tantas malas noticias. «Santi» es un bebé de 6 meses que tuvo que luchar contra todo para vencer el virus en el hospital, mientras su mamá le pedía a Dios que no los abandonara.
Cuando tenía 5 meses, empezó con diferentes malestares. Lloraba mucho y sus papás, desde su instinto, sabían que él no estaba bien de salud.
Mientras él luchaba por su vida contra el SARS-CoV-2 en el hospital, su familia lamentaba la separación y le pedían a Dios su pronta recuperación.
«A mí me dio muy fuerte separarme de mi bebé, dejarlo internado. Fue desesperante, fue muy duro, pero ya gracias a Dios el bebé está bien», contó su mamá, Saray Aguilar, a AMPrensa.com.
Santiago permaneció del 20 de agosto al 8 de setiembre en el centro médico luchando por su vida en salón general. Afortunadamente nunca requirió traslado a la Unidad de Cuidados Intensivos.
«La gente me ofrecía ayuda de cualquier tipo, pero gracias a Dios nunca nos hizo falta nada. Yo lo que pedía era oración por mi bebé, lo que necesitaba era que le pidieran a Dios por él», dijo la mamá de este pequeño.
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Bebé tuvo síntomas
Su mamá había dado positivo en julio y al resto de su familia los aislaron por nexo, incluyendo a Santiago, por lo que dedujeron que se trataba de Covid-19.
«El bebé empezó a llorar y presentó calentura. Lo llevamos a la clínica, lo revisaron por encima, pero nada más. Cuando llegamos a la casa, el papá lo revisó y le notó que tenía una pierna inflamada y el bebé seguía llorando», explicó.
Aguilar leyó en Internet que lo de la pierna podría ser un síntoma del Síndrome multisistémico inflamatorio pediátrico, el cual se deriva del Covid-19 y decidió llevarlo al Hospital de Niños.
«Yo llamé al 9-1-1 primero y me dijeron que teníamos que esperar, pero no llegaron. Llamamos al Hospital de Niños y nos dijeron que lo llevara inmediatamente, que era peligroso», agregó.
En el Hospital de Niños, el bebé dio positivo en la prueba. A Aguilar la enviaron de regreso a su casa y dejaron a Santiago internado.
Estando hospitalizado, a la familia de Santiago le informaron que, en efecto, el bebé tenía el síndrome pediátrico producto del virus. Fue el segundo niño en tener este padecimiento en el país.
«Me dijeron que el bebé quedaba internado, que no lo podía ver. Nosotros quedamos nuevamente en aislamiento y fue muy duro para mí, no poderlo ver por casi tres semanas», comentó la madre.
Para ella fue muy duro, porque ella lo cuidó mucho para no exponerlo. Afirma que solo ha salido tres veces de su casa: la primera a la vacunación, luego al hospital y ahora, ya recuperado, a la primera comunión de uno de sus hermanitos.
«Yo llego del trabajo y me baño, me lavo las manos, tomo muchas medidas, pero fue muy duro porque él es muy bebé», aseveró Saray Aguilar.
¡Ya se recuperó!
Santiago ya está recuperado y tiene una semana de estar junto a su familia. Ya no deben hacer cuarentena y se siente mucho mejor. Su carita le cambió y su pierna está bien, según cuenta su mamá.
«Él ahora come demasiado. Estoy muy feliz porque me lo atendieron de la mejor forma, son unos héroes», resaltó.
Su papá lo fue a recoger al hospital y es quien lo cuida en casa mientras mamá trabaja.
Al momento de su bienvenida, sus cinco hermanos y sus papás le hicieron una fiesta de bienvenida entre su burbuja social. La alegría era tanta que ni se acordaron de tomar fotografías, solo querían pasar con su hermanito.
