- El arbolito de Navidad es una tradición desde 1964
- Son 15 mil puntos de luz con tecnología LED
Redacción – El Hospital de Niños enciende con alegría las coloridas luces de su tradicional árbol de Navidad, el cual lleva esperanza a todos los pequeños, familiares y el personal de este centro médico.
La directora del centro médico, Olga Arguedas, afirma que, pese a las circunstancias actuales, el árbol de Navidad no podía quedar por fuera. Esta vez, la inauguración fue virtual.
«Esta navidad será diferente, ya que el principal regalo que debemos custodiar es el de la vida; sin embargo, no podemos dejar pasar la oportunidad de poner luz y esperanza en los corazones de nuestros pacientes y familiares, los cuales desde sus camitas de hospital podrán disfrutar de las luces de nuestro emblemático árbol y del espectáculo a través de las redes sociales. Estamos muy agradecidos con la CNFL y Dos Pinos por estar presentes un año más», expresó Arguedas.
Esta tradición tiene más de 50 años y, en esta ocasión, son 15 mil puntos de luz con tecnología LED, según el HNN.
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Además, indicaron que los colores más utilizados en las luces son el amarillo, rojo, azul, verde y blanco. Así que realmente es un «arbolito» muy colorido.
Un iluminado portal y tradicionales símbolos de la época también decoran el edificio.
Como es tradición, la iluminación del árbol está a cargo de la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL), así como un espectáculo de circo en las manos de la empresa Dos Pinos.
«Este tradicional apoyo de la Compañía es motivo de orgullo, pues nos permite aportar, a través de la luz y la energía que distribuimos desde hace 78 años, un granito de alegría e ilusión a los pequeños, a sus familias y a los funcionarios que, durante estas fechas festivas, se encuentran en el hospital», agregó la coordinadora de Gerencia de la CNFL, Laura Montero.
Cuando se inauguró el hospital en 1964, la dama diplomática y colaboradora, Marta Montis de Martínez, propuso colocar un árbol de Navidad en los jardines para alegrar a los niños.
«Durante los primeros dieciocho años, se buscó cuidadosamente un árbol de gran altura, frondoso y de fácil acceso para su corte y traslado. Pensando en los inconvenientes de trasladar un árbol desde la montaña, se decidió sembrar uno», indicó el HNN.
Desde entonces, esta tradicional y esperada actividad se realiza el primer jueves de cada diciembre.