Redacción-La policía de Bolivia tuvo que desmantelar una fiesta ilegal en una discoteca de Quillacollo, en Cochabamba.
Cerca de unos 70 jóvenes se encontraban en el interior del recinto cuando los agentes se personaron en el lugar.
En ese momento, y ante la desesperación, los participantes en la fiesta clandestina intentaron huir en estampida.
Sin embargo, los jóvenes tuvieron problemas para salir de la discoteca debido a que solo tenía una puerta por donde salir, por lo que los asistentes provocaron una avalancha humana.
Algunos de ellos se quedaron atrapados bajo la marea de gente. Aunque la noche pudo terminar en tragedia, afortunadamente nadie resultó herido de gravedad. Tras el desalojo, la policía detuvo a varias personas.
Desde el comienzo de la pandemia, Bolivia acumula más de 200.000 positivos por coronavirus. En las últimas horas se han producido 60 muertes, cifra que Bolivia no registraba desde hacía casi una semana. En 11 meses de epidemia, el covid-19 ha acabado con la vida de más de 10.000 bolivarianos.