- Ciudadanos de El Salvador están molestos por la forma de gobernar y las ideologías de su presidente
Redacción – El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, continúa en el ojo público, esta vez por autodenominarse «dictador» del país que gobierna a través de Twitter.
¿Una broma o una realidad? ¿Una burla a quienes lo califican así? Eso todavía se desconoce. Bukele no se ha pronunciado al respecto y, desde su candidatura a la presidencia, le gustaba la ironía y el sarcasmo a través de redes sociales.
Desde inicios de setiembre, gran cantidad de salvadoreños se han pronunciado en contra de su presidente, acusándolo de dictador por sus intenciones de permanecer en el poder por medio de la reelección tras modificaciones constitucionales.
También introdujo el bitcoin como forma de pago legal en El Salvador, lo que también tiene molestos a muchos habitantes de ese país. Tanto así que el mismo 15 de setiembre hubo una multitudinaria marcha en contra de las ideologías de Bukele.
LEA TAMBIÉN: Salvadoreños conmemoran la independencia en protestas contra Nayib Bukele
Además, cuando la nueva Asamblea Legislativa asumió el 1° de mayo, el mandatario destituyó y reemplazó a los magistrados de la Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia y al fiscal general, que habían tenido serias diferencias con él, irrespetando la democracia y división de poderes. Esa misma Sala Constitucional fue la que ahora hace posible su reelección.
Detrás de la palabra «dictador», a muchos se les viene el recuerdo de Adolf Hitler en Alemania, Augusto Pinochet en Chile, Benito Mussolini en Italia o Federico Tinoco Granados en Costa Rica. Pero no hay que irse tantos años atrás ni muy lejos. Nicolás Maduro en Venezuela y Daniel Ortega en Nicaragua.
Ahora, expertos políticos internacionales y la misma población califican a Bukele de «futuro dictador» por su forma de gobernar. También lo tachan de populista por sus discursos.
Desde hace un tiempo atrás, la descripción en su cuenta era «Papá de Layla» en honor a su hija que nació en 2019.