- Frente a la crisis climática, de biodiversidad y del océano, Costa Rica vuelve a demostrar su incansable compromiso con el bien común del planeta y de todas las criaturas que lo habitan
Redacción- El día de hoy en Ginebra, Suiza, tras varios años de intensa labor diplomática liderada por Costa Rica, el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, aprobó por primera vez una resolución que reconoce el derecho humano a un medio ambiente limpio, saludable y sostenible.
Frente a la crisis climática, de biodiversidad y del océano, Costa Rica vuelve a demostrar su incansable compromiso con el bien común del planeta y de todas las criaturas que lo habitan. Esta aprobación ayudará a fomentar la adopción e implementación efectiva de estándares ambientales globales más sólidos y homogéneos.
El Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto de Costa Rica destaca cómo la política exterior y la diplomacia ambiental continúan siendo un espacio clave para el bienestar y la supervivencia de las generaciones presentes y futuras
La embajadora costarricense Catalina Devandas, presentó la resolución a la sesión plenaria del Consejo, enfatizando que el texto establece este derecho como un estándar común que todos los países y todas las personas deben realizar, y expresó claramente que todos, en todas partes tienen derecho a un entorno que les permita vivir una vida con dignidad, igualdad y libertad.
El texto de la resolución liderada por Costa Rica fue propuesto originalmente por cinco países: Costa Rica, Eslovenia, Maldivas, Marruecos y Suiza. Que trabajaron juntos y progresivamente para lograr este objetivo, estableciendo así un núcleo claro y consistente de los derechos humanos de la Organización de Naciones Unidas y el vínculo interno entre los derechos humanos y el medio ambiente.
Actualmente 155 países en su legislación nacional reconocen el derecho a un medio ambiente sano, en el caso de Costa Rica este derecho está reconocido en el artículo 50 de nuestra constitución política, sin embargo, esta es la primera vez que este derecho ha sido reconocido internacionalmente dentro de las Naciones Unidas.