Redacción – El Ministerio de Educación Pública (MEP) no podrá destruir las cuestionadas pruebas FARO que se realizaron el pasado viernes a los estudiantes de quinto grado de escuela.
El Tribunal Contencioso Administrativo resolvió que este material debe ser custodiado de forma judicial, por lo que la solución del MEP no será posible.
Luego de las múltiples críticas y denuncias de padres de familia y docentes, quienes vivieron de cerca a lo que fueron sometidos los estudiantes, la cartera educativa informó que estas pruebas iban a ser devueltas a los encargados de estudiantes o destruidas si no son reclamadas.
La resolución se da después de la solicitud de medida cautelar por parte del Sindicato de la Judicatura (Sindijud) del Poder Judicial.
El sindicato decidió tomar una acción inmediata debido al riesgo que aseguran existe al destruir pruebas o evidencias que permitan tomar acciones sobre estas evaluaciones.
La prueba duró entre cuatro y cinco horas. Niños y niñas entre 10-12 años tuvieron que permanecer en un aula rellenando «bolitas» para responder numerosas preguntas correspondientes a esta larga evaluación que pretendía conocer cuánto influye el contexto en las calificaciones, según el MEP.
Entre las preguntas destacaban las que consultaban el tipo de cielo raso que tenía su casa de habitación, si esta era propia y completamente pagada; alquilada o prestada, el estado de las paredes y del piso.
«Hubo un error en su elaboración, pues se obvió que una prueba tan larga era inadecuada para ser aplicada a niños y niñas de 11 o 12 años y que algunas preguntas, no se formularon adecuada ni oportunamente», dice la cartera.
El Tribunal también ordenó que no se obtenga información sensible, de ningún tipo, de estas pruebas hechas.
Una vez notificado, el ministerio deberá enviarlas al Tribunal para su custodia judicial.
