Redacción. Los economistas de la Universidad Nacional aseguraron que la próxima administración se enfrentará a retos importantes y a una coyuntura internacional adversa.
Fernando Rodríguez, coordinador y economista de la UNA, expresó si bien la pandemia aún no ha terminado, e incluso cuando concluya, las consecuencias de la misma perdurarán y deberá tenerse en consideración el impacto de este proceso en actividades económicas particulares y en algunas instituciones públicas.
La recuperación de la normalidad pre-pandémica, si eso llegase a ser posible, no garantizará que todos los problemas se resolverán de forma automática.
Además, que el crecimiento económico será más bajo: 3,6% al proyectado en octubre del 2021.
En materia fiscal, durante el 2020, se logró un déficit primario muy bajo, pero el gasto en intereses sigue siendo muy alto y no existen propuestas concretas de los grupos políticos para reducir ese gasto.
La próxima administración deberá tomar decisiones con respecto a la implementación del impuesto mínimo global, aún en discusión su diseño final por parte de la comunidad internacional y deberá afrontar la posible erosión de la recaudación del impuesto único a los combustibles, debido al avance del proceso de descarbonización en el país, que lo obligará a un reacomodo del sistema tributario nacional.
Rodríguez manifestó que a pesar del crecimiento de la economía en 2021, que incluso llevó la producción a estar por encima del nivel alcanzado al cierre de 2019, previo a la pandemia, la mayor actividad económica no logró llevar el desempleo a los niveles pre-pandémicos.
“El crecimiento por sí solo no va a resolver el problema del desempleo, pues este es aún muy elevado y está muy focalizado: por actividad económica, por región geográfica, por grupo etario y por género. Se requieren un crecimiento económico más alto de forma sostenida por más tiempo, pero con medidas específicas para retomar la actividad de sectores vinculados al turismo, impulsar la creación de fuentes de trabajo con nuevas actividades en las regiones periféricas del país, motivar la incorporación de las mujeres al mercado de trabajo y procurar la creación de empleo dirigido a personas jóvenes”, puntualizó Rodríguez.