- El hombre había sido condenado a seis años de cárcel por el mismo delito
- Junto a él, se detuvo a otro hombre que se dedicaba a la misma actividad
Redacción- Cuando debía estar pagando con años de cárcel sus delitos, un hombre disfrutaba de un beneficio carcelario para estar en su casa y seguir delinquiendo.
Sin embargo, la fiesta se le acabó gracias a una investigación de la Policía de Control de Drogas, la cual permitió su nuevo arresto.
El delincuente operaba en conjunto con otro hombre y se dedicaban a la ilícita venta de drogas en Liberia de Guanacaste, a escasos 25 metros de un centro educativo.
De acuerdo con el Ministerio de Seguridad Pública, los hombres fueron identificados como López Vargas, de 59 años, y Soto Montano, de 50 años.
López es la «golondrina» que disfrutaba de su libertad para seguir siendo un criminal, pues tenía una condena de seis años de cárcel por el mismo delito y usaba tobillera de monitoreo electrónico para gozar del beneficio carcelario.
Ambos vendedores de drogas operaban todos los días de la semana y las 24 horas del día, según la investigación de las autoridades.
“La Policía Control de Drogas inició en el mes de julio una investigación, la cual condujo a la detención de dos personas, una de estas, de apellido López Vargas, gozaba con un sistema de monitoreo electrónico, había sido sentenciado por este delito a seis años de prisión», dijo el director de la PCD, Stephen Madden.
Para detener a los vendedores de drogas, la PCD realizó un allanamiento en la localidad liberiana de Moracia.
Tras las diligencias, la PCD decomisó 775 dosis de crack, cocaína rosada -conocida como Tusi- y marihuana. Además se incautaron ¢84 mil colones.
Finalmente, esta misma tarde, tras su detención, a López Vargas le impusieron 3 meses de prisión preventiva. Mientras tanto, a Soto Montano lo dejaron en libertad y le pusieron como medida firmar periódicamente cada 15 días.
